Las universidades y la formación para el trabajo

Por Liberto Ercoli, decano de la UTN Bahía Blanca

El fenómeno global conocido como brecha de habilidades (“skills gap” en inglés), afecta los mercados laborales y el empleo de millones de personas y se ha visto potenciado con los cambios de operatividad de las empresas e instituciones impuestos por la pandemia. Este fenómeno, cuyo origen es prepandemia, consiste en que la innovación tecnológica destruye aceleradamente cientos de miles de posiciones laborales en diversos oficios, a la vez que crea cientos de miles; sólo que los desempleados no pueden adaptarse a los nuevos empleos por carecer de las competencias necesarias.

Podrían citarse innumerables ejemplos, pero quizás el siguiente sirva para ilustrar el concepto. Hasta hace unos diez años, era común observar operadores de barreras manuales, cuidadores y cobradores en las playas de estacionamiento. De a poco, estos fueron reemplazados por barreras, sistemas de monitoreo y cajeros automáticos. Suele escucharse ¿cuántos empleos se han destruido con esto? ¡Y es cierto! Pero ¿cuántos nuevos empleos hacen falta para diseñar, desarrollar, construir, programar y operar estas tecnologías? ¿Es posible cubrirlos con quienes sólo poseen competencias manuales? No… en principio.

El gran desafío de los países consiste en la reconversión de una gran proporción de sus poblaciones mediante capacitaciones en oficios. De hecho, la mayoría de los gobiernos lo impulsan con energía, ya sea a través de institutos de formación profesional, ministerios de trabajo, gremios, municipios, etc. Últimamente, la Secretaría de Políticas Universitarias de nuestro país ha lanzado una convocatoria para que las universidades desarrollen sus propias escuelas de oficios, considerando esta actividad como un primer eslabón de la transferencia tecnológica de las universidades al medio socioproductivo.

En este aspecto, la Universidad Tecnológica Nacional viene adelantándose en el tiempo con sus 30 Facultades Regionales debido a su estrecha relación con el mundo del trabajo. La Regional Bahía Blanca ha desarrollado desde hace más de 15 años un Centro de Certificación de Competencias y Capacitación Profesional (C4P) http://c4p.frbb.utn.edu.ar/pages/home-index.php, en convenio con el Parque Industrial y la colaboración de grandes, medianas y pequeñas empresas, trabajando para la inclusión vía la capacitación en oficios demandados. Algunos programas de formación y certificación son homologados por el Ministerio de Trabajo, otorgándoles validez nacional.

La actividad más importante del C4P es sin dudas el programa “Buen trabajo”. Lleva 15 años ininterrumpidos brindando oportunidades de capacitación gratuitas a desempleados y nació como una inquietud del Panel Comunitario de Ing. White, mesa de diálogo de Dow para conocer las prioridades de esa población. En ese lapso, más de 1300 jóvenes obtuvieron sus certificaciones en diversos oficios. Este año participan la Asociación de Propietarios del Parque Industrial, Baipro, Celsur, Dow Argentina, Pampa Energía, Consorcio De Gestión Del Puerto, Municipalidad, Unión Industrial, Consultora Adecco y Panel Comunitario de Ing. White. Los cursos 2021 incluyen: refrigeración y aire acondicionado 1 y 2; instalaciones eléctricas hasta 1000V y 10 KW; optimización energética domiciliaria e industrial; comercio electrónico y generadores de energía solar.