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se dijo en la brújula 24

Denuncia que un padre fue armado al ex Colegio Nacional y amenazó a su hija

La mujer señaló que todo comenzó cuando descubrieron al hijo del agresor fumando marihuana adentro del aula. “Decía que mi nena lo había buchoneado”, lamentó.

Fotos Pablo Noir - La Brújula 24

Rosana es mamá de una alumna del ex Colegio Nacional y está por demás asustada. De hecho, tomó la decisión de cambiar a la menor de establecimiento –también a su novio, que está a su cuidado– por considerar insuficientes las garantías para su seguridad.

En diálogo con el equipo del programa “Bahía Hoy”, que se emite por LA BRÚJULA 24, la mujer recordó que todo empezó el jueves de la semana pasada, cuando dos alumnos fueron descubiertos fumando marihuana en el aula. “Decían que mi hija y el novio los habían ‘buchoneado'”, lamentó.

Aunque ese sólo sería el comienzo de una historia que, según relató, iría escalando en cuanto a violencia. “Lo prendieron como si nada, la preceptora los vio y los llamaron a la dirección. Amenazaron a mi hija diciendo que era buchona. Se llamó a los padres, los retiraron, vino la policía, los revisó y les encontraron el cigarrillo”.

Y siguió: “Yo a los míos los retiré antes. Después, nosotros vivimos a cinco cuadras del centro, los chicos salieron a caminar y se los cruzaron sobre Sarmiento, casi llegando a Alem. Mi hija iba con el novio, que también está a mi cargo, y estaban con los padres también. Les gritaban de vereda a vereda y los siguieron una cuadra. En un momento, la mamá de estos pibes llamó a un patrullero diciendo que mis chicos estaban con un cuchillo. Los policías los revisaron y por supuesto que no tenían nada”. 

“Al día siguiente fui a plantear lo que había pasado al colegio, tuvimos una reunión con el vicedirector, una señorita de psicopedagogía y la preceptora. Se dejó el acta y me dieron garantías de que iban a hacer algo. Recién el miércoles los volvía a llevar. Mi nena no quería entrar por miedo, pero le aseguraron que iban a estar bien, cuidados”.

Luego, vendría el momento de extrema violencia que le hizo tomar la drástica decisión. “En el recreo estos dos chicos empezaron a seguir a los míos, a insultar, querer discutir. Se volvió a llamar a los padres y a la hora más o menos me llamó mi nena diciendo que estaban encerrados en un curso porque los padres, junto con otro hijo de ellos, estaban pateando las puertas para ingresar al curso. El padre tenía un cuchillo y el vicedirector lo invitaba a salir del colegio”.

“Ayer tuve una charla con la directora Nancy Barraza, pero no se hace cargo de nada. No permite que la policía ingrese al colegio, más allá del riesgo por el que pasaron los chicos. La denuncia la voy a hacer hoy porque ayer terminamos muy tarde, voy a ir a Fiscalía y al Consejo Escolar para que se tomen las medidas que tengan que tomar”. 

“Los voy a cambiar de colegio, ahí no tienen ninguna seguridad y nadie se hace cargo”, sintetizó.

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