Messi cenó en un restaurante porteño, con una multitud esperándolo afuera

La gloria que significa salir campeón del mundo recién está comenzando a entrar en la cabeza de Lionel Messi. Los hinchas están eternamente agradecidos por el papel de la Pulga en la Copa del Mundo que se disputó en Qatar y el futbolista del París Saint Germain, que regresó a la Argentina para disputar los amistosos con Panamá y Curazao, salió a cenar por la zona de Palermo en la noche del lunes y su presencia en un restaurante despertó la locura de todos los fanáticos.

El capitán eligió un conocido restaurante y compartió una mesa íntima junto a un grupo de familiares y amigos del mundo del espectáculo. Fue el propio Adrián Suar el que reveló el misterio de los participantes de la velada con una publicación de Instagram. “Qué linda cena compartimos ayer. Qué hermoso verlos. Nos reímos mucho con tantas anécdotas. Los quiero”, redactó el actor y productor con una foto en el interior del establecimiento.

En la postal aparece Suar junto a su ex pareja Griselda Siciliani y su hija Margarita, quien se asustó en el ingreso al ver la ola de gente que se abarrotó en la puerta del restaurante y tuvo que ser acompañada por un agente de seguridad. Además, Lionel estuvo secundado por su madre Celia y dos de sus hermanos, Matías y Sol. El actor Gustavo Bermúdez completó la mesa. La ausencia de Antonela Roccuzzo llamó la atención pero la pareja del futbolista se quedó con sus tres hijos (Mateo, Thiago y Ciro) y, según la información que circuló en algunos medios, habría decidido viajar a Rosario.

Suar coordinó su presencia con Matías, el hermano de Messi. La agenda del rosarino es difícil de prever cuando está en Argentina, pero apenas decidió ir al famoso restó se dio la comunicación con el reconocido actor para poder verse las caras. Adrián también sumó a la noche a su ex pareja y a su hija, que viven por la zona, con el deseo de que Margarita pueda tener su foto con el astro rosarino. La intención de Suar era estar un rato, sólo para poder saludar a su amigo, pero la jornada se terminó extendiendo por varias horas entre anécdotas y risas.

El detalle es que lentamente una marea de fanáticos se fue aglutinando en la puerta para ver al capitán campeón del mundo. Si bien le ofrecieron buscar una salida alternativa por alguna puerta trasera, Messi –según pudo saber este medio– pidió salir por adelante para poder devolver a sus seguidores al menos con un gesto todo el amor que le brindaron desde la puerta. Así caminó entre una multitud como pudo y logró que los hinchas tengan al menos unos segundos a su lado. Y lo hizo de buen semblante y sonriente.

Fuente: Infobae/La Capital