San Rafael, un lugar tan encantador que provoca quedarse

Es uno de los cinco lugares preferidos por los turistas en Argentina. Su ubicación, su clima, sus paisajes, su comida y su gente envuelven de tal manera que al visitante le provoca quedarse a vivir. Se trata de la ciudad mendocina de San Rafael, ubicada a 232 km de la capital provincial y a 855 km de Bahía Blanca.

El heterogéneo relieve de San Rafael se compone por altas cumbres de la cordillera de los Andes y sierras menores al oeste y llanuras y depresiones hacia el este. Es recorrido por los ríos Diamante y Atuel que provienen de la fusión de la nieve en la cordillera y aportan no solo riqueza energética sino también lugares para el descanso y la práctica de deportes acuáticos.

Se encuentra allí el museo de historia natural más importante de la provincia y también la cultura huarpe aún sigue presente en artesanías donde las guardas colores y dibujos se multiplican en tejidos y cerámicas. San Rafael es un terruño de inmejorables condiciones para elaboración de espumantes y vinos de alta calidad, lo que ha permitido el desarrollo de la vitivinicultura. Tanto en las bodegas emblemáticas de la zona, como aquellas más pequeñas que pueden ser consideradas boutique, reciben hoy visitantes que se acercan a conocer los procesos de producción a grande o pequeña escala y a degustar el amplio abanico de vinos.

“Hay distintas experiencias para vivir. Tenemos más de 25 bodegas abiertas al etnoturismo, nos caracteriza mucho la parte cultural, sabemos que tenemos la naturaleza, una excelente gastronomía, pero sobre todo, tenemos algo muy importante que es ser sanrafaelino. Seguramente llegas aquí y preguntas cómo llegar a un lugar y un sanrafaelino te va a subir al auto y te lleva”, dijo Javier Muñoz, director de turismo de la ciudad, en conversación con el programa Amo Viajar, que se transmite por La Brújula 24.

Muñoz destacó la diversidad de lugares para alojarse con los que cuenta esta urbe y se encuentran en el centro, en el mismo cañón del Atuel, en Valle Grande, donde hay una bodega con habitaciones. “Tenemos para todas las opciones y para todos los bolsillos. Dependiendo de los servicios que se quieran contratar, hay habitaciones económicas partiendo por un valor por persona de $2.000 pasando por cabañas para cuatro personas en $6.000 y alojamientos de alto nivel con valores que están en los $25.000”, agregó.

San Rafael cuenta con lo que se conoce como “la perla del turismo” que es el cañón del Atuel. “La particularidad que tiene es que vas a pasar por distintas centrales, por diques, por lagos, donde vas comprendiendo lo que aporta al sistema interconectado de energía. Vas a ir apreciando un cañón desde arriba y desde abajo y con avistaje de cóndores. Está todo acá, todo por verse, por disfrutarlo”, señaló el funcionario.

Una de las facilidades que brinda la ciudad para el turista es contar con toda la información que necesita para disfrutar su estancia en formato digital al que se puede acceder en la página www.sanrafaelturismo.gov.ar, con la opción de ponerse en contacto con los operadores para organizar el viaje por completo.

“Les recomiendo siempre partir desde la ciudad, donde hay bodegas. Si hacés el circuito del Diamante, te permite recorrer la ciudad y pasás por lo que fue la villa de cabecera con una historia muy rica, con el último fuerte que tuvo la Argentina, pedido por los pueblos originarios. Allí está muy cerca Los Reyunos, un espejo de agua donde se pueden realizar distintas actividades, paseos en catamarán, tirolesa, tiro bungee, hay de todo y con lugares para alojarte y para acampar”, explicó Muñoz.

Otro de los recorridos, que en invierno no tiene acceso, es el circuito de Sosneado, desde donde salen las expediciones al avión de los uruguayos (el del accidente ocurrido en 1972, con una dramática historia de supervivencia), baños termales y está muy cerca del Valle de Las Leñas, que permite hacer paseos de un día y poder disfrutar de la nieve.

“En materia cultural, hay que recorrer los museos. Visitar el laberinto de Borges, hecho en homenaje al escritor que vacacionaba en San Rafael, donde te vas a encontrar con manuscritos que ni sabías que existían de Borges. La verdad que la experiencia para vivir acá es increíble”, relató Muñoz.

Si se trata de comer, hay que probar la famosa “carne a la masa”. Un plato tradicional que consiste en carne envuelta en masa que se cocina por largo tiempo en horno de barro. “Es algo exquisito”, comentó el funcionario.

San Rafael tiene una excelente conectividad terrestre con siete líneas de colectivos y con vuelos diarios desde Buenos Aires, gracias a siete empresas, que además prestan servicios desde otros puntos del país.

Otro de los imperdibles es el parque infantil Plaza Francia, rodeado de restaurantes y con juegos blandos, donde además hay un teatrino con obras para grandes y chicos en época de temporada alta, todo con entrada libre.