Qué dijo el Presidente tras conocerse los nuevos números de la pobreza

El presidente Alberto Fernández fue uno de los únicos dos funcionarios de su administración que se refirió al número récord de 40,6 de pobreza, que el INDEC dio a conocer ayer miércoles. “La pobreza sería peor si el Estado no hubiera auxiliado como lo hizo durante la pandemia”, señaló el jefe de Estado durante su intervención en la videoconferencia organizada por la Pastoral Social de la Ciudad de Buenos Aires. Así lo publica hoy el diario Clarín en su versión digital. 

“Cuando llegamos la pobreza era del 35 por ciento. Nadie puede estar en paz con su conciencia sabiendo que 4 de cada 10 argentinos están en estado de pobreza, que uno de cada 10 está en estado de indigencia. Nadie puede estar en paz. Para resolver eso la solidaridad tiene mucho que ver, tenemos que construir un país con esas lógicas”, expuso Fernández el primer orador de la jornada, desde el salón Norte de Balcarce 50.

En la Casa Rosada, el mandatario repasó su discurso junto al secretario de Asuntos Estratégicos Gustavo Beliz. El flamante miembro de la Academia Pontificia de Ciencias Sociales del Vaticano tiene entre sus responsabilidades la relación con la Iglesia. El secretario de Culto Guillermo Oliveri, amigo personal del mandatario, esta vez no fue de la partida.

Entre las tareas que el Presidente le encargó a Beliz sobresale, también, la convocatoria del postergado Consejo Económico y Social, que la Iglesia y la Pastoral Social, en particular, reclama. De hecho, el documento “Hacia una cultura del encuentro. Un país para todos” que presentó el padre Carlos Accaputo, presidente de la pastoral, incluía una convocatoria similar. “La consideración de la situación actual así como las alternativas para la salida de la emergencia requieren hoy más que nunca del diálogo, de una convocatoria amplia para definir y acordar un modelo estratégico de futuro, la construcción de los lineamientos centrales de un plan de mediano y largo plazo y la implementación de mecanismos e instrumentos institucionales para la construcción de los mismos que hagan viable su aplicación”, afirma el texto eclesiástico.

Sin embargo, en la Casa Rosada confirmaron que la iniciativa que originalmente el Gobierno enviaría al Congreso en enero está congelada. “Eso no quiere decir que quede descartada”, señalan, aunque lo imaginan como un instrumento ordenador para después de la pandemia y para pensar políticas de largo plazo y no de coyuntura. El documento de la Iglesia, en la misma sintonía, propone la creación de un Consejo Nacional Postpandemia y de un pacto social.

Fernández, durante su intervención, hizo un guiño al requerimiento de la Pastoral. “Quiero que todos trabajemos juntos. Podemos construir la lógica del acuerdo y que todos ganen y antes que nada, que ganen los que peor están”, dijo al nombrar al presidente de la UIA Miguel Acevedo y al secretario general de la CGT Héctor Daer, que también participaron del zoom. También fueron de la partida el vicejefe de Gobierno porteño Diego Santilli y Esteban “Gringo” Castro, secretario general de la CTEP/UTEP.

Cerca del Presidente y en la secretaría de Culto, en Cancillería, señalan que ni la Iglesia ni la Pastoral Social de la Ciudad hicieron a Fernández ningún pedido puntual: ni por el aborto ni por mayor asistencia social.