“Se quiso hacer creer que Facundo se fue de su casa porque estaba enojado”

Luciano Peretto, uno de los abogados de la familia de Facundo Astudillo Castro, el joven de Pedro Luro que se encuentra desaparecido desde el 30 de abril, habló esta mañana con LA BRÚJULA 24 y aseguró que “se quería hacer creer que Facundo se fue de su casa porque estaba enojado”.

En diálogo con el equipo del programa “Hoy También”, el profesional dijo estar de acuerdo con que la causa haya pasado al Fuero Federal, pero remarcó que “hubiésemos querido no llegar a esta circunstancia, y que la investigación tomara el curso que pedimos desde el principio”.

“Lo planteamos hace ya 15 días, la única hipótesis para sostener con las pruebas obtenidas hasta el momento es la desaparición forzada”, indicó.

En esa misma línea, Peretto aseveró que “se trató de retener la causa quizás porque estuvieron mucho tiempo atrás de pistas que eran vagas y falsas. Y creo que esa labor, respetando el trabajo de De Lucía a quien considero un gran profesional, tuvo que ver con alguna orden que pedía continuar en esa línea”.

“Todo cambió cuando se empezó a mediatizar la causa. Antes se quería hacer creer que Facundo estaba enojado o jugando un partido de fútbol atrás del Hospital Penna y que por eso se había ido de la casa”, sostuvo.

En otro tramo de la nota, el abogado brindó detalles de la investigación. “Hubo por lo menos dos efectivos en el primer contacto con Facundo en Buratovich. Es un hecho confuso porque lo que se dijo en el rastrillaje no es lo mismo que dice el acta”.

“Después hubo dos agentes más que intervienen, que tienen que ver con otro encuentro. Una policía que lo lleva hasta Origone haciendo dedo, es decir la misma policía que lo estaba infraccionando dice que lo lleva, y otro más que dice que concurre por el llamado de testigos que le manifestaban que estaban preocupados porque había un chico tirado en la ruta en el asfalto. Pero que cuando llega lo ve caminando por el alambrado y lo requisa. Para nosotros ahí está la clave de la investigación”, expuso.

Y agregó: “Se menospreció la hipótesis de que haya desaparecido con la implicancia de fuerzas policiales. Si nos paramos frente a un expediente en el que se dice que el último contacto fue en Buratovich, donde dejó de funcionar el celular; que durante el rastrillaje surge el testimonios de dos personas que dicen que una agente lo llevó a dedo, es como un chiste todo”.