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el relato del horror

"Me decían que me iban a clavar un destornillador en el ojo"

El empresario Eduardo Ciarocchi y su esposa fueron víctimas de tres ladrones armados anoche en su casa de 12 de Octubre al 2400. Estuvieron atados más de una hora. Les robaron más de medio millón de pesos. Aquí, su testimonio.

Eduardo Ciarocchi, dueño de una conocida maderera bahiense, y su esposa Nancy, fueron víctimas anoche de tres malvivientes armados que entraron en su casa de 12 de Octubre al 2400 y los hicieron vivir una pesadilla.

Los ataron, los golpearon, los amenazaron y les robaron más de 500 mil pesos en efectivo que, tal como explicó el propio Eduardo al móvil de LA BRÚJULA 24, eran de su negocio e iban a ser depositados hoy en un banco.

Por eso ellos no tienen dudas, los delincuentes tenían el dato. Y ahora, indignados y asustados, solo piensan en mudarse a un departamento.

"Estábamos sentados cenando. El error humano nuestro fue dejar abierta la puerta del patio porque hacía mucho calor. Se mandaron, cuando nos quisimos acordar ya los teníamos acá", recordó el comerciante.

Y agregó, respecto del modus operandi de los ladrones. "Nos tiraron al suelo y nos ataron a los dos. Uno se quedó con nosotros, mientras que los otros robaban. A mí me aplastaban la cabeza y me decían que me iban a clavar un destornillador en el ojo".

Más calmado después de algunas horas del hecho, aunque con la vista perdida por el evidente temor, Eduardo recordó que en ese momento "me faltaba el aire", y reconoció que "yo vi que entraron dos, pero mi señora vio a otro más".

"Se llevaron la plata que teníamos del negocio para después llevarla al banco, unos 500 mil pesos. Seguramente hubo un entregador. Tenemos cámaras en el negocio y hace 15 días que se veía un auto dando vueltas, han hecho un trabajo previo", dijo con la bronca lógica por lo ocurrido.

Además, contó que "para estar acá con miedo sin poder salir al patio me voy, hace 37 años que vivimos acá pero no da para más. Queda el miedo de que se metan otra vez, es horrible".

Y Nancy, en tanto, que anoche tuvo que ser asistida por una ambulancia por un ataque de nervios, recordó que "yo no paraba de hablar, les pedía que se fijaran que mi marido es hipertenso y tenía que tomar la pastilla".

"Les decía que pensaran bien lo que hacían y que no se llevaran una vida", cerró.

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