La Iglesia pidió que no interrumpan la ayuda a los centros asistenciales

En medio de las protestas frente al Ministerio de Capital Humano por parte de organizaciones sociales, la Iglesia emitió un comunicado instando al Gobierno a no interrumpir la asistencia alimentaria en los comedores, enfatizando que “en nuestra patria nadie debería pasar hambre”.

La titular de la cartera, Sandra Pettovello, generó controversia la semana pasada al sugerir que recibiría “individualmente” a quienes reclamaban alimentos frente a su oficina.

Ante la crisis económica y el ajuste, la Iglesia exigió que el Estado garantice el acceso al pan diario como un derecho fundamental. Criticaron duramente el impacto de la inflación en los precios de los alimentos, afectando especialmente a la clase media, los jubilados y aquellos que trabajan en la economía informal.

Destacaron que, en medio de la difícil situación económica, las familias se ven obligadas a privarse de muchas cosas, pero “una mamá puede privarse de tomar un colectivo y camina para ahorrar, pero de ninguna manera puede no darle de comer a sus hijos. Es decir, la comida no puede ser una variable de ajuste”.

La Iglesia subrayó la importancia de anticiparse para evitar una profundización de la crisis alimentaria y abogó por una respuesta comunitaria organizada, como se ha visto durante la pandemia con la multiplicación de comedores en parroquias, iglesias evangélicas y otros movimientos populares.

En este sentido, pidieron ayuda sin dilación para todos los espacios de cuidado que brindan asistencia alimentaria, proponiendo programas como el PNUD como herramientas auditables y de impacto positivo.

El comunicado concluyó resaltando el compromiso de la comunidad religiosa y los movimientos populares de continuar trabajando por el bienestar de todos los argentinos, con el objetivo de alcanzar el sueño de “Tierra, Techo y Trabajo” para cada familia.

Con información de TN