El fiscal Zorzano lamentó que por el paso del tiempo Lopes no sea juzgado

Tal como te viene informando LA BRÚJULA 24, luego de 15 años de proceso judicial, la Sala III del Tribunal de Casación Penal de la Provincia decidió sobreseer el exintendente Rodolfo Lopes, quien en 2006 fue destituido tras ser acusado por estafa y malversación de caudales públicos.

Cabe recordar que dicha investigación estuvo a cargo del fiscal Gustavo Zorzano, a cargo de la Unidad de Delitos Complejos, quien esta mañana habló con el periodista Germán Sasso, analizó la situación y realizó un repaso cronológico de cómo se fueron dando los hechos. Entre varios conceptos, dijo que “cuando uno trabaja y dedica mucho tiempo a una causa aspira a llegar al juicio, pero a veces no se puede por contingencias procesales como esta”.

“No puedo indicar fechas en este momento porque no tengo la causa en mis manos, pero todo se inicia a raíz de una denuncia penal que hizo una funcionaria de su gabinete -de Lopes- Martínez, que había recibido amenazas telefónicas. Entonces el doctor Quirós entendió que era prudente intervenir el teléfono de la víctima. La doctora Calcinelli en ese momento ordenó la intervención y a partir de eso aparecen distintas irregularidades en la Municipalidad”, recordó.

Y siguió: “Ante eso, el propio Quirós amplía la intervención a otros teléfonos. Y ahí se determinó desdoblar la investigación, por un lado iban las amenazas y por el otro las irregularidades. En ese momento la causa llega a mis manos. A partir de ahí comenzamos a investigar, siguieron un tiempo más las intervenciones telefónicas, había mucha más prueba. Pero lo cierto es que los datos que nos aportaban esas intervenciones eran la génesis de la causa”.

Datos de las escuchas. “Había varias irregularidades, una que tengo presente era recibir dinero de empresas del Polo. Por eso no fue imputado solo Rodolfo Lopes sino algunos integrantes de su gabinete y empresarios de la ciudad. Se indagaron a todos los imputados, la doctora Calcinelli entendió que la causa estaba bien llevaba y elevó la causa a juicio oral”.

El ataque de la defensa. “A partir de ahí empezaron las misivas de la defensa intentando demostrar que las escuchas eran ilegales. Acá hay que distinguir que cuando uno habla de ilegalidad habla de algo absolutamente fuera de la ley, pero en realidad esto no es así, esas intervenciones fueron solicitadas por fiscales de Bahía, ordenadas por jueces, y las realizó la Dirección de Observaciones Judiciales que depende del Ejecutivo Nacional. No fueron hechas por un policía de forma arbitraria”.

“De pronto, el ataque de la defensa que lógicamente era importante porque buscaba que la causa se caiga, apuntaba a situaciones de procedimiento formal. En las primeras instancias se hizo lugar a esas nulidades, pero la causa finalmente llegó a la Corte, que es el máximo tribunal de la Provincia. Se analizó esta cuestión y se demostró que las intervenciones estuvieron bien hechas”.

Se cayó la causa. “La Corte dice que eran legales, que en definitiva lo que se venía haciendo en los procedimientos era exactamente igual y nunca hubo un planteo de nulidad. En esta causa nos manejamos como siempre. Manda el procedimiento nuevamente a la primera instancia para continuar. Si bien esa resolución fue muy importante para nosotros, porque reconoció nuestro trabajo, lamentablemente llegó muy tarde, más de una década después”.

“Se termina finalmente por el paso del tiempo con acción penal, tiene que trascurrir un plazo igual o superior a la pena máxima establecida para el delito que se trate. Es decir que si se trata de un robo con una pena máxima de 6 años, si transcurren 6 años y un día desde el inicio de la causa, la misma prescribe. Acá los delitos eran peculados, con penas de hasta 10 años”.

“Igualmente desde nuestra Fiscalía se apeló la resolución porque se entendía que resultaba injusto que se concursara todo el tiempo que demandó la presentación de recursos. Aunque jurídicamente está terminada la causa”.

Sensaciones. “Cuando uno trabaja y dedica mucho tiempo a una causa aspira a llegar al juicio oral o en su caso a un abreviado, que de alguna manera reconozca la tarea realizada, pero a veces no se llega por contingencias procesales como esta. Uno está acostumbrado a que pasen estas cosas. Seguimos trabajando con otros casos que nos merecen la misma atención que en su momento ameritó esta. Hubo bastante gente que trabajó muchas horas por día, algunos de ellos ya no están conmigo, es nuestro trabajo”.

“Una de las formas de ejercer la defensa natural de una persona es criticar la labor que hace otro, desde ese lado lo tengo que aceptar, pero lo importante es explicarle a la gente que cuando nosotros trabajamos tenemos plazos establecidos y tratamos de cumplir con la Ley Penal. Cuando uno llega a una resolución no es una decisión propia, tiene que estar respaldado con prueba que está en la causa. Esa resolución fundada es porque analiza toda la prueba que está en la causa, obtenida con anterioridad, y está a disposición de las partes. Esa es la forma de trabajar”.