Rabbione y el impacto de la inundación: "Fue un desastre, pero vamos a salir adelante"

El empresario Fernando Jorge “Tero” Rabbione analizó en diálogo con La Brújula 24 las consecuencias que dejó la histórica inundación en Bahía Blanca, particularmente en sus emprendimientos ubicados en las inmediaciones del arroyo Napostá. Rabbione explicó que varios de sus locales sufrieron daños de consideración, entre ellos La Barraca, que llegó a registrar hasta un metro de agua en su interior. “La verdad que los daños fueron importantes, el local de la esquina más La Barraca tuvieron hasta un metro de agua, nos hizo perder mucho equipamiento, electrónica. Estuvimos tres días de agua y eso no nos permitió limpiar, pero bueno, hoy los negocios del centro ya están todos abiertos y, si Dios quiere, el 28 o 29 estamos abriendo de nuevo La Barraca”, señaló.

El empresario expresó que, a pesar de las pérdidas materiales, existe un ánimo positivo de cara a la reapertura. Rabbione destacó la respuesta del público, recordando el fuerte vínculo que mantiene la gente con sus espacios de entretenimiento. “Estamos contentos porque tuvimos una captación de imagen muy positiva, mucha gente memoriosa que vivió su juventud ahí tiene y todavía muchas ganas de bailar”, remarcó en la entrevista. A su vez, subrayó que venían de una exitosa temporada en Monte Hermoso y que, al momento de la tormenta, se encontraban desarrollando la tradicional noche de “jueves picante” en Bronx. “La gente estaba bailando porque era jueves picante, algo tradicional. Estaban en pleno desarrollo, con el local muy concurrido y empezó a llover. El encargado me llamó por teléfono para ver qué hacíamos y le dije que cortara porque podía darse algún corte. La gente no se quería ir porque era mucha la lluvia. En una o dos horas nos vimos todos envueltos en una marea de agua”, recordó.

Rabbione relató que, mientras el temporal arreciaba, se tomó la decisión de cerrar el local y evacuar al personal. “Yo estaba en mi domicilio y me decían que cada vez era más dramático. Pudimos cerrar y cada uno de los chicos se pudo ir a su casa. Durante el transcurso del viernes fue todo un caos”, explicó. En ese sentido, reconoció que la decisión de interrumpir la actividad fue prudente. “Fue una medida acertada con el diario del lunes, porque capaz que cortábamos a las 4 y dejaba de llover al rato. Pero mejor ser precavidos ante estas situaciones”, sostuvo.

El empresario también hizo hincapié en la magnitud del desastre natural. “¿Quién se iba a imaginar que lloverían 400 milímetros? Yo tenía la camioneta abajo de mi domicilio, en Alem al 100, y el agua la tapó, fue un desastre”, contó. Respecto a otros de sus locales, como Mundo de la Pizza y Milanno, señaló que sufrieron daños menores y que pudieron reacondicionarse rápidamente.

Finalmente, Rabbione remarcó que, ante la difícil situación que atraviesa la comunidad, decidió destinar la recaudación de la noche de reapertura de La Barraca a colaborar con los damnificados. “Viendo cómo está la gente, en Cerri por ejemplo, uno tiene que ser agradecido. La gente que trabaja con nosotros, siendo que tenemos más de 100 empleados, necesita trabajar. Entonces, como para tomar una medida, decidimos que la noche de apertura de La Barraca, todo lo que se recaude en boletería va a ser destinado a colaborar con la gente. Ya nos comunicamos para eso con la Municipalidad”, concluyó.