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Un blooper salvó a Boca de perder en su visita a Florencio Varela

Los Xeneizes, que la pasaron mal en el primer tiempo, terminaron más cerca del triunfo ante Defensa y Justicia en un partido que empezó muy entretenido y después se pinchó.

B oca, que estuvo dos veces abajo en el marcador, alcanzó el empate en su visita a Defensa y Justicia, en Florencio Varela, que no terminó de conformar a ninguno de los dos, porque siguen lejos de los punteros al completarse la sexta fecha de la Liga Profesional.

Santiago Ramos, Miguel Merentiel, Aaron Molinas y Kevin Gutiérrez, contra su propio arco, en ese orden, dibujaron el 2-2 que para los Xeneizes representó la antesala de lo que será la definición del Repechaje contra Independiente del Valle, el miércoles, por el Repechaje a octavos de final de la Copa Sudamericana, en la Bombonera.

Obligado a ganar, como siempre, en este caso para mantenerse con chances en el plano local, Boca se presentó en Florencio Varela con una formación diagramada a partir de la serie de factores que complican un presente con otro partido a la vista: el del miércoles en la Bombonera, contra Independiente del Valle, Ecuador, por el Repechaje clasificatorio a los octavos de final de la Copa Sudamericana.

Entre los convocados para el seleccionado Sub-23 de Argentina que representará al país en los Juegos Olímpicos, y los lesionados, entre ellos Edinson Cavani y Marcos Rojo, Diego Martínez apeló a los cuatro refuerzos que no pudo incluir en Quito por un error administrativo: Gary Medel, como marcador central; Tomás Belmonte, en el medio, recostado sobre la derecha; Brian Aguirre, en el carril opuesto; y Milton Giménez, arriba, junto a Merentiel.

La situación hizo que en un par de casos, los nuevos tuvieran que ocupar posiciones no habituales, y en ese contexto los Xeneizes sumieron una actitud contragolpeadora, que de entrada generó un partido rápido, de escasa circulación en la franja central, porque el Halcón también recurrió a un juego basado en la velocidad.

Defensa se hizo cargo del juego, apretando a Boca, y tras un par de aproximaciones, un pelotazo largo de Lautaro Blanco para Merentiel determinó la primera llegada a fondo del conjunto visitante, que a la vuelta sufrió una llegada de Ayrton Portillo, que remató cruzado, aunque desviado, desde posición favorable.

Un tiro de esquina servido desde la derecha fue el punto de partida para el primer grito de gol en la noche del estadio Norberto “Tito” Tomaghello. Falló Belmonte en el despeje y la pelota llegó hasta Santiago Ramos, con libertad para definir de zurda. No lo gritó el defensor en respeto al club en el que se formó en las divisiones inferiores.

Pero una mano de Portillo, que pudo evitar, tras un centro cruzado desde la derecha, propició el empate boquense tras un penal que Merentiel se encargó de asegurar con un derechazo cruzado, que tampoco festejó por su pasado en Varela.

El empate fue aprovechado por Diego Martínez para acomodar a su equipo, moviendo básicamente a Belmonte, Medel, Guillermo “Pol” Fernández y Aguirre, a los efectos de cubrir espacios utilizados por el local para establecer superioridad.

En estos términos, el juego se equilibró, hasta que nuevamente Defensa, y por intermedio de un ex Boca, Aaron Molinas, volvió a sacar ventaja, en este caso con un pelotazo desde afuera del área que metió la pelota junto a la base del palo de la mano derecha de Sergio “Chiquito” Romero.

El segundo tiempo se puso en marcha con un par de modificaciones en Boca (adentro Jabes Saralegui y Mateo Mendia), y en el primer ataque a fondo llegó el empate luego de una corrida de Milton Giménez, cuyo remate terminó adentro por un descordinado cierre a cargo de Víctor Aguilera y Kevin Gutiérrez, quien en definitiva se encargó de sellar la igualdad.

A esta altura de la noche, el conjunto Xeneize ya tenía controlado a un rival que futbolisticamente estaba lejos del nivel expuesto en la etapa inicial, a partir de un Juan Miritello que complicó a todos los marcadores en cada corrida.

Los cambios, varios de los cuales, en Boca, estuvieron orientados a cuidar el físico de jugadores que tendrán que jugar el miércoles, desarmaron un tanto el partido, aunque el equipo azul y oro, de los dos, fue el que estuvo más cerca del tercero en una noche cargada, en la que Diego Martínez debió poner en cancha un 11 con los cuatro refuerzos y varios juveniles.

Defensa continúa sin ganar en lo que va de la Liga Profesional, y de los “grandes” es al que más le cuesta complicar.

Fuente: LB24 / El Día.

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