El orgullo de los familiares de Artémides Zatti: “Vivimos el día con mucha emoción”

Tal como se venía anunciando, finalmente este domingo el Papa Francisco proclamó santo al beato ítalo-argentino Artémides Zatti, conocido como “el enfermero de la Patagonia”. Al respecto, Mónica García Zatti, pariente del laico, expresó su gran orgullo y emoción en diálogo con la redacción de LA BRÚJULA 24.

“Vivimos el día con mucha emoción, mirando la ceremonia en directo por la TV Pública, acompañándonos con mi prima Norma -sobrina de Zatti- a la distancia”, comentó Mónica, quien tiene muy presente a Artémides porque era primo hermano de su abuelo.

“Recordando mucho a la familia también, a mi abuelo, mis tíos, mi mamá… Los que ya no están y que seguramente estarán de gran fiesta allá arriba”, agregó.

“Creí, prometí y sané, ese es el lema de esta canonización de Artémides. Creo que resume todo lo que fue su vida y el ejemplo que es para nosotros. En estos tiempos tan difíciles ojalá seamos capaces de hacer lo que hoy en su homilía nos pidió: caminar juntos y ser agradecidos”, completó Mónica, emocionada por la noticia.

La familia del nuevo santo se trasladó a la Argentina en 1897 buscando un futuro mejor, asentándose en Bahía Blanca, y ahí creció Zatti, quien tras trabajar como mozo en un hotel y como obrero, accedió a los 20 años en los Salesianos.

En 1902, Zatti emprendió un viaje para misionar por la Patagonia y conoció a Namuncurá, a quien cuidó hasta sus últimos días.

El feligrés, que nació el 12 de octubre de 1880 en Italia y falleció en Viedma, Río Negro, el 15 de marzo de 1951, fue canonizado este domingo en la Plaza San Pedro, en el Vaticano.

Zatti, quien había sido declarado beato por Juan Pablo II en 2022, fue proclamado como santo luego de que se reconociera el milagro logrado a través de su intercesión en la curación de un hombre que sanó de un “ictus isquémico cerebeloso derecho, complicado con lesión hemorrágica voluminosa”, en agosto de 2016 en Lipa, Filipinas.

Fuente: LB24 / con información de Télam