Exclusivo: habló la dueña del geriátrico trucho y se defendió

Vanina es una de las dueñas de la residencia donde se encontraba alojada la mujer de 82 años que murió ayer en el Hospital de la Asociación Médica por coronavirus, en el resultado de un hisopado que se conoció horas después de su deceso.

En diálogo exclusivo con LA BRÚJULA 24, aclaró que el inmueble ubicado en Avellaneda al 700 “es un hogar sustituto, que nunca funcionó como geriátrico. Es una casa de familia donde las abuelas están bien. Cada una de ellas tiene su vivienda y cuando se declaró la pandemia decidimos que se queden en este lugar para que no estén en circulación”.

“Mi mamá se encarga de darles la medicina, atenderlas, tomarles la temperatura. Ninguna de las otras abuelas tiene síntomas. Los hogares sustitutos tienen un límite de cuatro personas como máximo. En este caso, seis de las abuelas tienen su departamento pero están solas. Cuando se dictó la cuarentena decidimos que permanezcan acá por su bienestar”, explicó, en el programa “Tal Cual Es”.

Sobre la mujer fallecida, explicó que “en ningún momento tuvo síntomas, se alimentaba bien y no tuvo dolores estomacales. Nada hacía pensar que fuera un caso positivo de COVID-19. El sábado se descompensó, se sintió desanimada, no le daban las piernas para caminar. Por eso llamamos al servicio de emergencias para que la revise un médico”.

“A nosotros nos informan que tenía una neumonía aguda. eso está debidamente certificado. Incluso tenemos un médico que realiza un control periódico de cada una de ellas. Hasta el momento que ocurrió esto, nadie del Estado se había presentado. Tenemos una chica que estudia enfermería y nos veníamos manejando desde la página web donde se establece el protocolo de sanidad”, añadió en otro segmento de la entrevista radial.

Respecto a los dichos de vecinos que mencionaban que por el inmueble circulara mucha gente, sostuvo: “Es erróneo que saliera y entrara gente. Solo los familiares retiraban a sus abuelas antes de la declaración de pandemia y sólo circulaban los dueños del hogar. El jueves, la abuela que falleció se sentía triste y el hijo (marido de Mónica Grimberg) vino a verla. Ingresó y se fue por el garage para no tener contacto con otras residentes”.

“La abuela pasó de ver a su hijo a diario a no verlo por tres meses. Por eso sentía la necesidad de que la visite. La retiró, con todas las medidas necesarias. Ella estaba en una habitación aparte y no tenía contacto con las otras ancianas. La llevó a dar un paseo en el auto y nunca imaginó su deceso por COVID-19”, reconoció.

Asimismo, admitió que “para nosotros fue una sorpresa que haya dado positivo, no entendemos cómo pudo suceder si el viernes, un día antes de su fallecimiento, estaba en buen estado. Los hijos mandaban los medicamentos por delivery para no tener contacto con sus madres”.

“No manejo ninguna hipótesis, tampoco pudo haber sido que se haya contagiado en el paseo con su hijo porque el virus tiene una incubación de 14 días. Hubo una abuela, familiar nuestra, que falleció días atrás por una infección en una cirugía de cadera que se complicó. Es por eso que los vecinos vieron una ambulancia de Ferrandi en la puerta”, explicó Vanina.

Por último, luego de aclarar que cada abuela tiene su médico particular, recalcó: “Estamos esperando los resultados de laboratorio para conocer cómo se originó el virus en el hogar. A mi familia también la van a hisopar para despejar cualquier duda. El círculo íntimo de la mujer fallecida ya adelantó que va a tomar acciones legales por el manejo de la información”.