Pruebas Aprender 2024: solo el 45% de los chicos de tercer grado alcanza el nivel esperado en lectura

Los resultados de la prueba Aprender Alfabetización 2024 encendieron una señal de alerta: solo el 45% de los estudiantes de tercer grado alcanzó los niveles de lectura esperables al finalizar el primer ciclo de primaria. Es decir, más de la mitad de los alumnos no logra una comprensión adecuada de textos.

Esta evaluación se realizó el 20 de noviembre de 2023 y fue presentada por el Ministerio de Capital Humano durante el Congreso Nacional de Alfabetización para Supervisores. La subsecretaria de Información y Evaluación Educativa, María Cortelezzi, fue la encargada de exponer los resultados ante autoridades y supervisores educativos de todo el país.

Participaron 91.042 estudiantes de 4178 escuelas públicas y privadas, seleccionadas aleatoriamente en todo el país. La participación fue alta: el 97,4% de las escuelas y el 86,9% del alumnado formaron parte del operativo, marcando un récord histórico.

¿Cómo se midió la lectura?

Los estudiantes fueron evaluados en su capacidad para leer palabras, oraciones y distintos tipos de textos, tanto literarios como no literarios. Además, completaron cuestionarios sobre su experiencia escolar, permitiendo un análisis más profundo de los factores que influyen en el aprendizaje.

Los resultados se clasificaron en seis niveles de desempeño:

• Lector incipiente: no se puntuó. Lee palabras con apoyo de imágenes.
• Niveles 1 y 2: el 30,5% está significativamente atrasado.
  • 3,3% inicia lectura de oraciones.
  • 8,3% inicia lectura de textos simples.
  • 18,8% comprende textos simples de forma literal.
• Nivel 3: el 24,5% está en proceso. Comprende textos complejos literalmente e inicia lectura inferencial.
• Niveles 4 y 5: el 45% alcanzó los niveles esperados.
  • 26,4% comprende textos de forma literal, inferencial y reflexiva.
  • 18,7% realiza inferencias complejas.

Brechas por nivel socioeconómico y tipo de escuela

El informe evidenció desigualdades estructurales. Solo el 40% de los alumnos de escuelas estatales alcanza el nivel lector esperado, frente al 62% en escuelas privadas. Además, uno de cada tres estudiantes estatales está rezagado, mientras que en el sector privado es solo uno de cada seis.

Entre los sectores más vulnerables, el 44% de los estudiantes está rezagado, tres veces más que en sectores altos (12,6%). Aunque no se pudo relevar el nivel socioeconómico directamente por la corta edad de los alumnos, se utilizaron datos contextuales como acceso a servicios, tecnología y cantidad de personas por hogar.

Según el análisis:

• Clases altas: 66,8% alcanza el nivel lector esperado.
• Clases medias: 51%.
• Clases bajas y media-bajas: menos del 40%.

Hábitos de lectura y entorno familiar

A pesar de que el 76% de las aulas estatales y el 65,7% de las privadas cuentan con bibliotecas, solo el 50% de los alumnos dice leer en su tiempo libre, mientras que el 80% prefiere ver videos en redes sociales.

En escuelas estatales se reporta mayor uso de libros en clase (74,3%) y más frecuencia en el préstamo de libros a domicilio. En cuanto a lectura en familia, el 36,5% de los alumnos estatales dice que sus padres les leen, aunque el acompañamiento en tareas escolares es más frecuente en escuelas privadas (78,1% en general).

Además, el 83% de los estudiantes tiene acceso a un celular, lo que representa un nuevo desafío para mantener la atención y fomentar la lectura sostenida en la era digital.

Resultados por provincia

Las cifras muestran fuertes contrastes regionales. Estos son algunos datos destacados:

• Ciudad de Buenos Aires: 55,5% alcanzó niveles esperables.
• Provincia de Buenos Aires: 43,7%.
• Formosa: 63,6% (uno de los mejores desempeños).
• Chaco: solo 34,2%.
• Córdoba: 58,8%.
• Santa Fe: 41,4%.
• Misiones: 38%.
• San Juan: 37%.

Innovaciones metodológicas en la prueba

La edición 2024 de Aprender incorporó mejoras sustanciales impulsadas por el secretario de Educación, Carlos Torrendell. Entre ellas:

• Nuevos ítems con diversos niveles de complejidad.
• Impresión a color y recreos durante la prueba.
• Administración por dupla de aplicadores.
• Análisis de datos alineado con estándares internacionales (PISA).
• Nueva escala de seis niveles de desempeño.
• Inclusión de estudiantes antes no caracterizados en los resultados.

Estas mejoras permitieron una identificación más precisa de los estudiantes con dificultades lectoras, lo que contribuirá al diseño de planes operativos específicos para mejorar la alfabetización inicial.

Con información de TN