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a descansar en casa

Messi y Di María ya están en Rosario

“Olé, olé, Messi, Messi”, cantaban los rosarinos que se acercaron al aeropuerto.

Los jugadores de la selección argentina Lionel Messi, Ángel Di María y Paulo Dybala llegaron al aeropuerto internacional de Rosario y de inmediato se embarcaron en un helicóptero que los trasladó a sus hogares, en el caso de los dos primeros.

En un vuelo privado que partió desde la localidad bonaerense de San Fernando, los tres campeones del mundo arribaron a la estación aérea de Rosario a las 18.33 y unos minutos después bajaron de la aeronave.

“Olé, olé, Messi, Messi”, cantaban los rosarinos que se acercaron al aeropuerto para darles la bienvenida, aunque debieron conformarse con verlos desde lejos.

Mejor suerte tuvieron los empleados del aeropuerto con permiso para estar en la pista, que pudieron tomarse fotos con los campeones del Mundial de Qatar.

Apenas descendieron del avión, Messi y Di María acomodaron sus valijas en un helicóptero que los esperaba en la misma pista del aeropuerto y partieron rumbo a un barrio cerrado cercano, donde van a parar durante su estadía en esta ciudad santafesina.

En el vuelo también viajó el cordobés Paulo Dybala, sobre quien no se informó cómo continuaría su viaje hasta la provincia mediterránea.

El “leproso” Messi y el “canalla” Di María pasarán las fiestas navideñas en Rosario junto a sus familias, luego de participar hoy de los festejos por el campeonato mundial de fútbol en la Ciudad de Buenos Aires.

Los jugadores arribaron a Rosario sin sus familias.

Si bien se especuló con la celebración de un festejo de ambos con el público local, las autoridades municipales -que gestionaban con la familia de Messi esa posibilidad- decidieron descartarla, dijeron a Télam voceros del gobierno local.

Como consecuencia del operativo montado por la Policía de Seguridad Aeroportuaria (PSA) para el arribo de Messi y Di María al aeropuerto “Islas Malvinas”, las autoridades de la estación informaron que el acceso se vio restringido y algunos vuelos demorados.

Una multitud esperó al capitán argentino en la puerta de su casa en el barrio privado de Funes. Pese al cansancio por el viaje agotador desde Qatar, sumadas a las caravanas de la madrugada del lunes y el de esta tarde por Buenos Aires y gran parte de la capital en helicóptero, La Pulga saludó a todos y accedió a tomarse fotos. Su esposa Antonela Roccuzzo y sus hijos Thiago, Mateo y Ciro, junto a sus papás y otros familiares ya se encontraban en su hogar a la espera de su arribo.

Fuente: Télam / Infobae

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