Tolosa prometió trabajar para terminar con el “techo de cristal” en la Justicia

La doctora Pamela Tolosa, decana de Derecho de la UNS y flamante integrante del Consejo de la Magistratura, pasó esta mañana por los estudios de La Brújula 24 y mantuvo un mano a mano con el periodista Germán Sasso. Y habló de todo.

Primero, se refirió a la importancia del cargo que hoy la convoca. “Implica una enorme responsabilidad y hay que asumirlo teniendo cuenta todo eso. Hoy vivimos un contexto de especial agitación, en la que no es normal el funcionamiento del Consejo. Aunque en cualquier contexto se requiere siempre responsabilidad”.

“La Constitución estableció este organismo para dar mayor transparencia y calidad al sistema de designación de jueces. Y también al procedimiento para evaluación de su desempeño. Y en esa manda se establece la necesidad de que haya un equilibrio entre el poder político y otros estamentos técnicos. En uno de ellos me toca desempeñarme, que es el de los académicos. La designación y mecanismo de selección se hace a través del consejo interuniversitario nacional. Se hizo esta vez de forma indirecta, por el cual cada universidad mandaba profesores titulares en la carrera de abogacía”, comentó respecto del proceso de selección.

Y agregó: “El planteo de los que no estaban de acuerdo, básicamente la UBA, era porque en el sistema anterior ellos decidían los representantes de manera directa y el resto de universidades nos enterábamos por los diarios. El padrón de profesores de la Universidad de Buenos Aires tiene más de 100 docentes, mientras que en la UNS son 13. Y la misma realidad se da en todas las universidades que tienen una dimensión como la nuestra”.

Consultada sobre sus funciones en la UNS, Tolosa señaló que “esto es muy reciente, no hay en principio una incompatibilidad porque represento al estamento académico, pero en este caso veremos cómo se desarrollan los acontecimientos. Los que me conocen saben que para mí es sumamente importante desempeñarme con el mayor de los cuidados, con una enorme dedicación”.

Cruces políticos. “Hoy me preguntaban sobre el por qué de mi postulación y explicaba que esto no se conoce fuera del ámbito universitario, pero el sistema es muy complejo. Lograr una votación en la que tuve 17 a favor y solo 6 abstenciones, recordando que son de universidades que no están de acuerdo con el sistema de votación, pero en ninguna hubo un cuestionamiento hacia mí”.

“Lo cierto es que quienes conocen el sistema universitario y la complejidad de lograr consensos, saben que eso es difícil. En algún momento cuando me consultaron sobre esta posibilidad la verdad que mi idea era aceptar solo si era de consenso, estamos en un momento muy particular y quería tener la legitimidad de estar respaldada por todas las universidades. Esto se logró, es producto de un trabajo de muchos años”.

“Fui secretaria académica desde 2005 a 2017, fue un período de mucho trabajo porque se comenzó a trabajar en todo el proceso de evaluación de las carreras de abogacía y en muchos proyectos a través del Ministerio de Justicia. Tuve la suerte de trabajar con decanos que me dieron siempre un gran espacio y me permitieron participar. Entonces eso explica que soy una persona de las más antiguas en el Consejo de Decanos”.

“Si bien es la primera vez que ocupo este lugar, no es la primera vez que me toca trabajar con el Consejo de la Magistratura o la Corte. Justamente quienes estamos en el sistema universitario y tenemos un compromiso, si nos toca jugar un rol en este tipo de instituciones lo tenemos que hacer con la responsabilidad que corresponde. Primero dando cuenta al sistema universitario, para mí es mucho más que un juego de poder y esa presión de la que tanto se habla”.

Igualdad de género. “Hace tiempo se advierte un problema muy serio cuando vemos que en el Poder Judicial, más del 60% de las personas que trabajan son mujeres, pero cuando miramos quienes ocupan cargos de primera instancia son un poco más del 30%. Luego, cuando vemos en segunda instancia es poco más del 20%. Ahí se da el fenómeno llamado techo de cristal. Si más altos son los cargos jerárquicos, menos es la cantidad de mujeres”.

“Yo creo que es necesario generar igualdad real de oportunidades. Cuando se evalúan antecedentes, una situación que se da puntualmente es la siguiente: Hay dos personas, hombre y mujer de 45 años, cada uno tiene dos hijos, pero es probable que la mujer tenga períodos donde no haya hecho cursos de capacitación y eso pasa por el embarazo. Ahí hay un reparto desigual de las tareas de cuidado”.

“Podemos hablar de meritocracia cuando hablamos en ´pie de igualdad. Cada vez existe una mirada de mayor compromiso de los varones, pero aún estamos lejos”.