Los ocho hábitos que los expertos recomiendan para rendir mejor en los exámenes

Aveces, aunque haya voluntad, estudiar se convierte en una tarea muy difícil. Muchos factores pueden intervenir en el proceso en el que una persona se encuentra frente a los libros o los apuntes y eso puede generar un resultado negativo.

Por ser un tema de preocupación para quienes se encuentran en el proceso de aprendizaje, se convirtió en materia de investigación. Henry L. Roediger III y Mark A. McDaniel, psicólogos y expertos en aprendizaje y memoria, y el escritor de la Universidad de Harvard, Peter C. Brown, recomendaron en un libro una serie de hábitos para tener en cuenta y lograr un buen resultado.

“Apréndetelo: la ciencia del aprendizaje exitoso” es un libro en el que los expertos reunieron sus conocimientos para volcar una ayuda a quienes se encuentran en un proceso de estudio. Allí se pueden distinguir ocho hábitos que se deben aplicar para cumplir con el objetivo.

Los 8 hábitos para lograr mejores resultados a la hora de estudiar:

• Tener un buen descanso.
• Estar estimulado.
• Escribir a mano.
• Estudiar en voz alta.
• Alternar los contenidos.
• Tener tácticas de estudio.
• No repasar lo mismo muchas veces seguidas.
• Usar la mano no dominante.

El primero es una actividad fundamental: descansar. Además de dormir por las noches, se recomienda algunos descansos extras entre horas. De esta forma, el cerebro está en condiciones de almacenar información.

Los expertos recomiendan también que durante el estudio, se tomen notas escritas a mano, ya que la escritura mejora la capacidad lectora y de la memoria y, de esta manera, se estimula el desarrollo de conexiones neuronales. A su vez, destacan que una lectura en voz alta aumenta la posibilidad de recordar lo que se estudia.

Los autores hacen hincapié además en la lectura consciente que se hace, por lo que consideran que leer lo mismo repetidamente puede no ser efectivo, por lo que se debe hacer con moderación y de una forma profunda.

Recomiendan, a su vez, que se haga una alternancia entre el contenido a estudiar, lo que significa un ejercicio para la memoria a largo plazo.

En cuanto a las técnicas, aseguran que son una herramienta positiva, ya que estudiar de memoria no es la única opción, sino que se pueden realizar apuntes, subrayar contenido relevante o realizar ejercicios prácticos. En esta línea, también sugieren utilizar la mano no dominante para hacer diversas tareas, ya que esto ayudaría a las conexiones cerebrales y al aprendizaje.

Por último, se habla de la importancia de la estimulación. Si bien es una palabra que se asocia a los primeros años de vida de las personas, donde comienza a aprender movimientos, palabras y actividades, esto debe extenderse a lo largo de los años, ya que es una ejercitación para la mente y genera nuevas conexiones neuronales. Con estos hábitos a aplicar se pueden tener resultados positivos a la hora de estudiar.

Fuente: La Nación