Persecución, choque y alcoholemia positiva

La policía detuvo anoche a un sujeto que, según informaron, manejando totalmente ebrio quiso escaparse de un control y luego chocó contra un patrullero.

El derrotero comenzó pasadas las 20 en Indiada al 3500 cuando el comisario Gonzalo Sandobal, de la seccional Cuarta –iba en su auto particular-, vio a un Audi Q3 que se desplazaba haciendo zigzag por el medio de la calzada, poniendo en peligro a otros conductores que pasaban por el lugar.

Ante ello, el uniformado solicitó apoyo vía radial para intentar detenerlo. Y así fue que lograron interceptarlo en la esquina de Indiada y Lainez, aunque al identificarse como personal policial, el temerario automovilista aceleró y huyó a toda marcha, recorriendo varias calles de Rosendo López y Villa Muñíz.

Al llegar a Pilcaniyen al 500, un móvil del Destacamento Patagonia intentó frenarlo, pero el Audi lo chocó de frente. De todos modos pudieron arrestarlo por el delito de desobediencia y daños. Se llama Ignacio Azpiroz (54) y asegura tener otra versión de lo ocurrido.

Por otra parte, explicaron desde la fuerza policial, cuando fue sometido al correspondiente test de alcoholemia, el resultado fue contundente: manejaba con 2.22 gramos de alcohol por litro de sangre –la contraprueba fue de 2.13-.