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en medio de la cuarentena

Quién es la jubilada de 83 años que salió a tomar sol en Palermo

Sara les dijo a la policía que “bajo media hora y me voy”.

La imagen de una mujer mayor tomando sol en una reposera en los bosques de Palermo era, hasta mediados del mes pasado, una postal común y lejana a la noticia. Sin embargo, en medio de la pandemia del coronavirus Covid-19, y a más de un mes del aislamiento social preventivo y obligatorio que rige en el país, causó sorpresa.

“Media hora voy a tomar sol y me voy”, fue la frase que la mujer les dijo a los oficiales de la Policía de Ciudad, que se sorprendieron ante el pedido y la firmeza de la mujer, que rompió hoy la cuarentena.

La vecina, que tiene su departamento sobre la Avenida del Libertador, en frente del gran pulmón porteño, tiene 83 años y se llama Sara O.

Sara, que ayer había hecho el mismo recorrido y ritual de hoy, ya fue notificada por incumplimiento del artículo 205 del Código Penal, que dice: “Será reprimido con prisión de seis meses a dos años el que violare las medidas adoptadas por las autoridades competentes, para impedir la introducción o propagación de una epidemia”.

La mujer llegó hoy minutos antes de las 15 a la plaza. Abrió su reposera en el pasto y se sentó a tomar sol, ante la atónita mirada de la policía. “A las 15.20 me voy”, les dijo. Cuando llegó la hora, se levantó y se fue.

Según detallaron fuentes policiales, se consultó a la fiscalía de turno para que decida qué se debe hacer con la mujer, que argumentaba que necesitaba tomar sol por su salud.

“Estamos a la espera de la instrucción de la fiscalía para saber si tenemos que escoltarla a su casa o labrarle algún tipo de acta por violar la cuarentena”, dijeron a este medio. Finalmente, la policía escoltó a la mujer hasta su casa.

“Es una gran estupidez de parte de la policía”, dijo por su parte Sara. “En vez de hacer lo que tiene que hacer [la policía] está vigilando el pasto. Yo me estoy recontra cuidando, lo malo es estar encerrada sin poder respirar, porque no tengo balcón. Hice lo mismo el sábado pasado y lo voy a hacer cuantas veces quiera porque necesito sol y aire”.

Fuente: La Nación

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