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Cinco horas y tres países: el extenuante viaje de la Selección para llegar a Venezuela

En la concentración albiceleste se vivieron momentos de mucha incertidumbre que están totalmente ajenos a lo futbolístico.

La Selección argentina pudo gambetear la amenaza del temible huracán Milton y aterrizó en la calurosa y húmeda Maturín después de un viaje de más de 5 horas y una escala en la ciudad colombiana de Barranquilla para enfrentar a la Venezuela de Fernando Batista por la novena fecha de las Eliminatorias Sudamericanas rumbo al Mundial de 2026. Con Lionel Messi como titular después de ausentarse en la doble fecha del mes pasado, la Albiceleste buscará recuperarse tras la derrota ante Colombia y volver al triunfo para encaminar la clasificación como líder de la tabla.

La preocupación invadió la concentración de la Argentina en Fort Lauderdale desde que comenzaron los primeros trabajos el pasado domingo. El predio de Inter Miami, el club que alberga a Messi, fue el escenario de los entrenamientos, siempre con el marco gris de un cielo cargado de agua como fondo. Los constantes chaparrones fueron parte de las prácticas. Las noticias sobre la intensidad del huracán llegaban a los teléfonos de los jugadores, que comentaban entre ellos y con sus familiares la incertidumbre por la situación de alarma instalada en la zona de Florida, donde se esperaba por el impacto de Milton, que llegó a alcanzar la máxima escala de los huracanes: la categoría 5, que estipula vientos de más de 250 kilómetros por hora.

“Estamos preocupados y esperando a ver si es verdad que podemos salir, dicen que para la tarde se podrá salir, pero no tenemos las certezas. Veremos si el clima lo permite”, había dicho Scaloni, sin ánimo de ocultar la tensión y la incomodidad que le generó a toda la delegación albiceleste este escenario complicado.

Finalmente, la Selección pudo partir tal cual estaba estipulado tras entrenar este miércoles por la mañana y hacer trabajos de pelota parada. El charter AV 7851 de Avianca dejó atrás a Miami alrededor de las 16 de Argentina y, si bien el destino final fue la región de Monagas, por cuestiones políticas debió pasar primero por Colombia.

Como no está permitido volar directamente desde Estados Unidos a Venezuela por problemas diplomáticos entre las naciones (tampoco desde Argentina), el vuelo aterrizó primero en Barranquilla. Allí todos tuvieron que bajar para pasar por los scanners, algo que también debió realizarse con los equipajes y materiales transportados por la delegación. El arribo a Maturín fue pasadas las 23:00 (hora argentina).

Así, aunque no se cumplió con precisión la norma de FIFA y Conmebol que estipula que los equipos deben estar en la sede del partido al menos con 24 horas de anticipación, sí se pudo estar el día anterior, lo cual no será motivo de conflicto teniendo en cuenta el contexto de fuerza mayor por las condiciones meteorológicas conocidas. Las autoridades tuvieron en cuenta las adversidades que enfrentó la delegación argentina.

Fuente: Clarín

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