Conductor imprudente que choque y destruya patrimonio público, deberá costear el arreglo

El conductor imprudente que choque y destruya patrimonio público, en especial si se encuentra alcoholizado o bajo los efectos de algún estupefaciente o haya infringido otro tipo de situaciones contempladas por el Código de Tránsito, tendrá que costear el arreglo de lo que rompa.

Así de simple es el plan que tiene previsto instrumentar la Municipalidad de Bahía Blanca, para intentar evitar incidentes de tránsito como los ocurridos en los últimos días, cuando conductores alcoholizados rompieron macetas que están en calle Alsina. Una iniciativa del mismo tenor se viene instrumentando desde el área de Obras Públicas, para casos en los que son destrozados semáforos.

Cuando se rompa patrimonio público, se pedirán las actuaciones al Tribunal de Faltas para contar con toda la documentación de rigor. Una vez que se tiene el presupuesto, lo elevan a la secretaría de Legal y Técnica para luego hacérselo llegar al infractor.

“El consumo de alcohol o de estupefacientes es un agravante, que en perjuicio del infractor se le suma al pago de la multa y el daño del auto. Es alguien que no sabe convivir en sociedad”, esbozó un vocero del área de Ordenamiento Urbano y Tránsito.

“La sentencia del Juzgado de Faltas corre por otro camino. Lo que se plantea ahora es abrir una instancia administrativa de cobro por daños, independientemente de lo primero”, se indicó.

El fin de semana se labraron 12 actas por alcoholemia positiva de un total de 876 conductores controlados.

“¿Quién puede asegurar que, con esos operativos, no hayamos evitado un choque de consecuencias imprevisibles, tal vez con víctimas? Cuando días pasados se produjo el choque con las macetas, se evitó el impacto contra la vidriera del local”, agregó.

La alusión vino a cuenta del hecho ocurrido el viernes en pleno centro de la ciudad, cuando un motociclista totalmente borracho, incrustó su moto contra dos macetas.