Su mamá la abandonó casi al nacer. En la niñez, su único objetivo fue caminar. No tuvo dónde dormir, aún vende diarios y brilla como atleta....
Fue durante la última visita del ex funcionario nacional a Bahía. "En su momento no reaccioné porque me quedaba sin boleta", reconoció el canillita.
Una profesión en extinción y un término que quedó inmortalizado en el lunfardo argentino y latinoamericano.