Los efectos nocivos son múltiples tanto para personas que adquieren el hábito como para aquellas que se exponen al humo ajeno.
Una reciente revisión de estudios demostró que el nivel de anticuerpos es menor en este grupo, en comparación con quienes no consumen tabaco.
Tienen un 50% más de peligro de empeorar su cuadro. Así lo afirmó el asesor del Ministerio de Salud, Mario Virgolini.