“El proyecto no obliga a usar el lenguaje inclusivo, pero respalda a quienes lo utilicen”

El Consejo Superior de la UNS aprobó en la sesión del último miércoles “aceptar como válidas las expresiones que supongan usos inclusivos y no sexistas de la lengua en las producciones escritas y orales realizadas por integrantes de los distintos estamentos de la Universidad Nacional de Sur, tanto en las producciones académicas como en la comunicación institucional, administrativa y de gestión”.

En diálogo con LA BRÚJULA 24, la subsecretaria del Área de Derechos Humanos de la principal casa de altos estudios bahiense, Andrea Montano, se expresó esta mañana respecto a las reacciones que despertó la medida entre la sociedad. “Hay gente que está a favor, otra que está en contra y una porción que le da igual. Nuestra institución está atravesada por la sociedad. Tal como se visibiliza, hay mucho desconocimiento y se verifica lo mismo que sucede con otras cuestiones. Por haber ido a la escuela, cualquier persona tiene derecho a opinar sobre la educación”.

“Sobre estos campos cuesta legitimar los saberes, pero mucha gente está investigando para construir conocimiento. En el lenguaje inclusivo se ha avanzado muchísimo y la Universidad no puede quedar ajena. Aquí se forman profesionales y en este punto hay mucho por hacer y un camino largo, con pasos pequeños”, sostuvo Montano, en el programa “Tal Cual Es”.

En esa misma dirección, enfatiza que “la prioridad estaba enfocada en plantear un protocolo que busque luchar contra la violencia de género. Se hicieron visibles las cuestiones binarias y, en esa línea se empezaron a dar discusiones como por ejemplo la modificación de señalética de los baños”.

“Este tema del uso inclusivo del lenguaje era algo en lo que se venía trabajando, sabiendo que había antecedentes de otras universidades, tomando en cuenta incluso documentos de la ONU, Mercosur y Cámaras de Diputados. Esto queda abierto a cada docente y alumno que pretenda utilizarlo”, resaltó en otro segmento de la entrevista radial.

Y sostuvo: “Se aprobó la aceptación de un uso no sexista e inclusivo del lenguaje y el promoverlo. Que dos más dos es cuatro es una construcción que está probada matemáticamente. La ciencia exacta no se puede debatir”. 

“Hace muchísimo tiempo en las escuelas se habla en un español bonaerense, por eso no nos preocupa la Real Academia Española. Por otra parte podría generar malestar la modificación de palabras, pero nadie podría cuestionar el fundamento del uso del lenguaje exclusivo que indica que producimos aquello que nombramos. La pregunta que debemos hacernos es qué tiene de malo nominar a los y las estudiantes”, agregó.

Incluso, yendo al fondo de la cuestión Montano fue tajante: “Analizar solo la letra ‘e’ al final de una palabra es banalizar la discusión. Lo que se pretende es visibilizar las desigualdades que hay en el fondo de todo esto. La noticia de los nueve investigadores que estaban haciendo un desarrollo sobre el COVID19 tenía ocho mujeres y sin embargo se mencionaba de manera genérica”.

“Este proyecto no obliga a nadie, pero visibiliza y respalda a quienes lo usan. En la escritura me cuesta mucho menos implementarlo que en la oralidad”, finalizó una de las responsables del proyecto que despertó múltiples interpretaciones.

Cruzó a Lanata

En una nueva edición de su programa televisivo, Jorge Lanata se burló de la expresión de la titular del Inadi, Victoria Donda, quien días atrás había denominado a los sectores más vulnerados de la sociedad como los “no blancos”, lo que dio pie al conductor de Periodismo Para Todos a realizar una serie de chistes al respecto.  

Montano dio su parecer al respecto: “No sé en qué contexto lo dijo. Me parece que genera violencia que es lo que queremos evitar. Le dice que tiene la mente en blanco porque es ella, si fuera un tipo quisiera ver si dice lo mismo”.

“Entiendo que lo que Donda quiso plantear es lo que no responde al estereotipo. Es una constante en cierta facción del periodismo paralizar y deslegitimizar lo que se plantea, corriendo la discusión y hablando solo de lo que ella tiene en la cabeza”, finalizó la dirigente de la UNS, aclarando que jamás un fundamentalismo es bueno, menos aún cuando solo busca imponer.