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Pollo relleno de espinacas y ricota: fácil y sabroso

En esta receta te mostramos cómo combinar sabores intensos para crear un plato rico y jugoso.

¿Qué podría ser más apetitoso que un jugoso pollo relleno con una mezcla irresistible de espinacas frescas y queso ricota? Esta maravillosa combinación de sabores intensos y texturas exquisitas te deleitará con solo imaginarlo.

No te preocupes si pensás que preparar un pollo relleno de espinacas y queso ricota es un desafío culinario. ¡Nada más lejos de la realidad! Con esta receta detallada, te sorprenderá lo fácil y gratificante que resulta.

Los ingredientes necesarios son accesibles y fáciles de encontrar, lo que significa que podés disfrutar de este manjar gourmet en la comodidad de tu propio hogar. Además, el resultado final es tan visualmente atractivo que podrás impresionar a tus invitados en cualquier ocasión especial.

Ingredientes

  • 4 pechugas de pollo deshuesadas y sin piel
  • 2 tazas de espinacas frescas lavadas y picadas
  • 1 taza de queso ricota
  • 1/2 taza de queso parmesano rallado
  • 2 dientes de ajo, picados finamente
  • 1 cucharadita de sal
  • 1/2 cucharadita de pimienta negra
  • 2 cucharadas de aceite de oliva
  • 1 taza de pan rallado
  • 1 huevo batido

Preparación

  1. Precalentar el horno a 180°C.
  2. En un bol, mezclar las espinacas picadas, el queso ricota, el queso parmesano, el ajo picado, la sal y la pimienta negra. Mezclar bien todos los ingredientes hasta obtener una mezcla homogénea.
  3. Colocar una pechuga de pollo sobre una tabla de cortar y con un cuchillo afilado, hacer un corte horizontal en el centro de la pechuga, sin llegar a cortarla por completo. Abrir la pechuga como si fuera un libro.
  4. Rellenar cada pechuga con aproximadamente 1/4 de taza de la mezcla de espinacas y queso ricota. Cerrar la pechuga y asegurarla con escarbadientes para que no se abra durante la cocción. Repetir este paso con las pechugas restantes.
  5. En un plato hondo, batir el huevo. En otro plato, colocar el pan rallado.
  6. Sumergir cada pechuga rellena en el huevo batido y luego pasarla por el pan rallado, asegurarse de que esté bien cubierta.
  7. Calentar el aceite de oliva en una sartén grande a fuego medio-alto. Colocar las pechugas rellenas en la sartén y cocinarlas durante 3-4 minutos por cada lado, hasta que estén doradas.
  8. Transferir las pechugas doradas a una bandeja para hornear y cocinar durante 20-25 minutos, o hasta que el pollo esté completamente cocido y los jugos salgan claros.
  9. Una vez que el pollo esté listo, retirarlo del horno y dejarlo reposar durante unos minutos antes de servir. Esto permitirá que los jugos se redistribuyan y que el pollo se mantenga jugoso.
  10. Retirar los escarbadientes de las pechugas antes de servir. Podés acompañar el pollo relleno de espinacas y queso ricota con una ensalada fresca o una guarnición. ¡Y a disfrutar!

Fuente: MDZ

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