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tiene prohibido conducir

Rebelde sin causa: Carlaván se esconde para no recibir la notificación del juez

Ni en casa ni en su empresa fue posible localizar al peligroso conductor.

La casa del empresario Jorge Carlos Carlaván Goñi. Foto Pablo Noir / La Brújula 24

Hasta esta noche no había sido posible notificar a Jorge Carlos Carlaván Goñi de la orden del juez que le prohibió conducir durante un año, luego de que la policía intentara cumplir con este paso del proceso en su casa y en Droguería del Sur, empresa de la que es dueño.

Los uniformados fueron a su casa y no estaba. De allí se dirigieron a la compañía y un abogado habló con ellos y se negó a recibir la notificación. Esto ocurre a tres días del último de sus múltiples choques en una concurrida zona del centro de la ciudad.

Todo parece indicar que usa la misma estrategia que llevó adelante su defensa cuando lograron que prescriba la causa en que iban a condenar a Carvalán por atropellar a un veterinario, durante una protesta.

“El señor no está en condiciones de firman la notificación. Está muy afectado”, le dice a la policía la gente que atiende la puerta en nombre de Carlaván.

Por su parte, el Fiscal General, Juan Pablo Fernández, respondió a un tuit del periodista Germán Sasso, en donde detalla el procedimiento que se debe seguir cuando una persona se niega a recibir la notificación judicial.

“Cuando el notificado o alguna persona mayor de 18 años pariente o dependiente que resida allí se nieguen a recibir la copia de la resolución y notificarse, debe ser fijada en la puerta de la casa, dejándose constancia en presencia de un testigo que la firmará”, dijo.

La medida cautelar, a pedido de la Municipalidad, la dictó el juez de Garantías N° 2, Dr. Guillermo Gastón Mércuri, y es por el lapso de un año. Se dio parte a la Secretaría de Gestión Urbana del Municipio de Bahía Blanca y al titular de la Superintendencia Región Sur de la Policía, comisario Aldo Caminada, a fin de que el personal de todas las dependencias locales y de la región estén al tanto del impedimento legal que el empresario tiene para manejar.

La decisión establece que debido al peligro que representa Carlaván para su propia seguridad, así como para otras personas y bienes públicos y privados, tiene prohibido conducir por un año. En caso de que volviera a encontrársele al volante de cualquier vehículo, será detenido.

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