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costumbre popular

Por qué comemos ñoquis los días 29 y se ponen billetes debajo del plato

Con distintos nombres, y con variedad de preparaciones, las bolitas hechas con alguna masa y cocidas en agua hervida o caldos, estuvieron presentes en culturas muy diversa

La papa llegó a Italia alrededor de 1560, aunque durante más de doscientos años no la usaron para alimentarse, sino como planta ornamental. Recién iba a comenzar a cultivarse a fines del siglo XVIII, luego de que Napoleón pasara con sus tropas por la zona del Piamonte. El ejército de Bonaparte se distinguía por la velocidad de desplazamiento. Para lograrlo, debía contar con provisiones adecuadas y fáciles de transportar. La papa fue una gran aliada de Napoleón y sus hombres.

Prestemos atención a la ruta del tubérculo americano, en un ligero repaso de lo leído en los capítulos previos: de Perú pasó a España y de allí a Colombia donde Francis Drake la tomó para llevarla a Inglaterra (en su tercer viaje oceánico), desde donde la exportaron a Alemania, el sitio donde la descubrió el francés Parmentier quien, al volver a París, difundió las bondades del alimento que Napoleón llevó a Italia. Fin del recorrido. Perú – Italia, con escalas.

Con distintos nombres, y con variedad de preparaciones, las bolitas hechas con alguna masa y cocidas en agua hervida o caldos, estuvieron presentes en culturas muy diversas. Pero los gnocchi o ñoquis de papa lograron cubrir varias necesidades, como ser la de una comida sencilla, económica, rica, a prueba de malas dentaduras, nutritiva y que saciaba el hambre.

En 1815, mientras en las Provincias Unidas del Río de la Plata se debatía la organización de un Congreso en Tucumán, los ñoquis ya se comían en la Liguria (norte de Italia), con pesto o con queso parmesano. A mediados del siglo XIX inició su lenta adaptación a las mesas del actual territorio argentino. Muy lenta. Recién a fines del siglo XIX comenzó a multiplicarse desde el más extraordinario campo de la cocina fusión: los conventillos.

¿Cuál era el plato económico que salvaba a todos a fin de mes, cuando la plata se había evaporado y había que resistir hasta cobrar el sueldo? Los ñoquis a la italiana, como le decían en un principio. De ahí proviene la costumbre de “los ñoquis del 29”, que en realidad significaba “ñoquis del último día antes de cobrar”.

¿Por qué se pone un billete debajo del plato?

Acerca de la costumbre de poner un billete debajo del plato de ñoquis el día 29, existen muchas buenas historias, algunas muy atractivas, pero poco comprobables. Todas remiten a una antigua creencia: que el dinero engendra dinero.

De aquella suposición surge, por ejemplo, la idea de que si dejamos olvidado un billete en un bolsillo, es señal de que aparecerá un dinero extra (no el del bolsillo, otro). O que, cuando se nos cae una moneda, no debemos levantarla nosotros, sino que debe hacerlo otra persona para que el dinero aprenda el camino a nuestras manos. La creencia de que un billete debajo del plato va a multiplicarse, se conoce aún antes de que se impusiera en los ñoquis del 29.

Fuente: iProfesional

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