El paso a paso para preparar un perfecto merengue italiano

El merengue italiano, con su textura suave, brillante y dulce, es una auténtica joya en el universo de la repostería. Este exquisito glaseado ha sido durante mucho tiempo una de las técnicas más apreciadas y versátiles en la cocina, utilizada para dar vida a una amplia variedad de postres, desde tartas hasta macarons y mousses.

Lo que hace que el merengue italiano sea realmente especial es su meticuloso proceso de elaboración, que involucra la preparación de un almíbar caliente que se vierte sobre claras de huevo batidas, creando una mezcla suave y espumosa. La fusión de estos dos elementos, el almíbar y las claras de huevo, da como resultado un merengue que es estable, sedoso y capaz de mantener su forma durante más tiempo en comparación con otros tipos de merengue.

Este maravilloso ingrediente puede ser utilizado para crear decoraciones en pasteles, servir como cobertura para deliciosas tartas, incorporarse en rellenos de postres o simplemente añadir un toque de elegancia a cualquier creación dulce que imagines.

Ingredientes

• 4 claras de huevo
• 200 g de azúcar
• 60 ml de agua
• Sal, una pizca (opcional)
• 1 cucharadita de extracto de vainilla (o saborizante de tu elección)

Preparación

1. Antes de comenzar, asegurate de que todos los utensilios que vayas a usar estén limpios y secos, ya que cualquier residuo de grasa puede evitar que las claras de huevo se monten correctamente. El primer paso es colocar las claras de huevo en un bol grande.
2. En una cacerola pequeña, combinar el azúcar y el agua. Revolver para disolver el azúcar.
3. Cocinar el almíbar a fuego medio-alto hasta que alcance una temperatura de 115°C (239°F), conocida como el punto de bola suave. Si no tenés un termómetro para dulces, podés probar el almíbar vertiendo unas gotas en un vaso de agua fría; debería formar una bola suave que puedas aplastar con los dedos.
4. Mientras el almíbar se cocina, comenzar a batir las claras de huevo a velocidad media hasta que se vuelvan espumosas. Si lo deseas, podés agregar una pizca de sal.
5. Aumentar la velocidad de la batidora y seguir batiendo las claras hasta que formen picos suaves. Deben estar listas justo antes de que el almíbar alcance la temperatura deseada.
6. Con la batidora a baja velocidad, verter el almíbar caliente en un fino hilo sobre las claras montadas.
7. Una vez que todo el almíbar se haya incorporado, aumentar la velocidad de la batidora a alta y continuar batiendo hasta que la mezcla se enfríe por completo. Esto tomará aproximadamente 10-15 minutos, y la mezcla debería volverse brillante, espesa y formar picos rígidos.
8. Cuando el merengue italiano esté casi listo, agregar el extracto de vainilla (o el saborizante de tu elección) y batir durante unos segundos más para incorporarlo completamente.

Con información de Ámbito Recetas