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TÍA DE DOS CAUTIVOS HABLÓ CON LB24

Angustiante pedido por rehenes de Hamas: “Necesitamos una prueba de vida”

Mirta Tinaro tiene a dos sobrinos retenidos por la organización terrorista.

David Cunio, uno de los sobrinos de Mirta Tinaro que permanece cautivo por parte de Hamas. Foto de archivo

Mirta Tinaro es tía de dos de los ocho argentinos que aún permanecen secuestrados por Hamas. Este domingo se cumplieron seis meses del brutal ataque de la organización terrorista que dejó 1170 muertos, en su mayoría civiles, según cifras israelíes. La mujer habló con La Brújula 24 sobre la angustia y desesperación que viven desde el rapto de sus sobrinos, sin que hasta el momento tengan una prueba de vida.

“Más allá de ser tía, viví en Israel y conozco el lugar que fue atacado. Mi familia se llama Cunio; son mis tíos, mis sobrinos, las esposas de mis sobrinos y los hijos e hijas de mis sobrinos. En el ataque el Hamas cometió todo tipo de crímenes en esa zona de Israel que linda con Gaza y murieron muchos israelíes y de otras nacionalidades; eran turistas y otros que vinieron a trabajar”, explicó Tinaro a “Todo es posible”.

Detalló que David fue secuestrado junto con su esposa, sus dos hijas de 3 años, su cuñada y su hija de 5 años de visita en el Kibud. Su otro sobrino, Ariel, fue privado de la libertad junto con su novia. Pasados algunos días del ataque, fueron liberados la esposa de David, su cuñada y los tres chicos.

“Fue todo muy terrorífico. Se encerraron en el refugio, quedaron atrapados porque incendiaban las casas y a personas que quedaban en el camino, las mataban. A los menores los raptaban cuando huían por las ventanas”, señaló.

Tinaro fue entrevistada a dos horas de un acto a realizarse en el Parque Centenario donde se iban a recordar a los fallecidos y renovar el pedido por la liberación de todos los que permanecen cautivos.

“Las únicas noticias son las de los familiares que volvieron. Y ellos tienen sus tiempos para hablar; estuvieron sin agua ni comida. A mis sobrinos los tuvieron siempre separados del resto. Necesitamos tener una prueba de vida y saber cómo están. Estamos desesperados porque han pasado seis meses”, indicó.

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