A través de una polémica resolución publicada ayer en el Boletín Oficial y que ya cosechó críticas, se autorizó a las distribuidoras de energía eléctrica que operan en territorio bonaerense a una suba adicional de la tarifa para compensarlas por el incremento de costos de los últimos meses.
Este nuevo aumento se instrumentará a través de la creación de un nuevo cargo en las facturas que se cobrará a lo largo de seis meses para los usuarios de Edelap, Eden, Edes, Edea y las más de 200 cooperativas eléctricas de la Provincia.
Con este incremento adicional, advirtieron ayer desde la Defensoría del Pueblo de la Provincia, la suba total de la tarifa eléctrica para todo el 2019, que se había anunciado en 38 por ciento, terminará superando el 55 por ciento.
La medida generó una inmediata controversia, ya que termina trasladando a los usuarios las eventuales pérdidas que experimentan las empresas por las demoras en las implementaciones de los aumentos. En ese marco, desde organismos de control advirtieron que podrían recurrir a la Justicia.
La resolución fue firmada por el Organismo de Control de la Energía Eléctrica (Oceba) el pasado miércoles y tomó estado público ayer. En seguida disparó fuertes críticas de la oposición. “Obligan a las familias a subsidiar a las energéticas”, dispararon desde el kirchnerismo.
Básicamente, crea un nuevo ítem que aparecerá a partir de febrero en las facturas de luz como “Incremento de Costos Tarifarios” (ICT). Se trata de una suerte de mecanismo de compensación para las empresas distribuidoras, similar al ICM (Incremento de Costos Mayoristas) que se cobra actualmente. Ambos apuntan a “reparar” los descalces que se producen en los sucesivos aumentos que se dieron en los últimos años.
“Es un mecanismo de compensación que permite a los distribuidores recuperar en su facturación además de las diferencias en la aplicación de los costos mayoristas de electricidad (precios de potencia y energía en el MEM y costos de transporte), las diferencias generadas en el costo propio de distribución”, se explicó oficialmente en la resolución que se publicó ayer.
CARGO FIJO
La Provincia acaba de autorizar un primer aumento de la tarifa eléctrica del año que comenzó a regir en febrero y que fue del 28 por ciento. En tanto que se habían anunciado que habría dos subas más a lo largo del año, en mayo y en agosto, por lo que el acumulado iba a ser del 38 por ciento en 2019.
Con ese nuevo cuadro tarifario, la factura promedio de un usuario residencial iba a pasar de $630 a 800 pesos mensuales.
Pero ayer sorpresivamente se dio a conocer este nuevo ajuste, que tendrá impacto sobre usuarios residenciales, pymes, beneficiarios de la tarifa social y entidades de bien público.
El ICT se aplicará a partir de este mes y llegará con las facturas que los usuarios recibirán en marzo. Será un cargo en pesos por cada kw consumido por el usuario. El monto varía según la empresa distribuidora y el descalce que haya sufrido.