César Ruesga es un verdadero laburante del básquet. Lo lleva en la sangre y, como no podía ser de otra manera, en su familia se respira este deporte. Uno de sus hijos es Fausto, quien ayer se colgó la medalla de oro en el torneo de volcadas de los Juegos Olímpicos de la Juventud, y emocionó a toda la ciudad.
En diálogo con LA BRÚJULA 24 FM 93.1, el papá del jugador dorado describió sus sensaciones: "Vivimos una jornada única. Todo era emoción y felicidad. Nos hubiese gustado estar allá. Estamos muy felices por él, lo vimos muy desenvuelto haciendo lo que le gusta".
"Tiene un estado atlético formidable. Termina los entrenamientos y se queda practicando, por eso lo vivió con la alegría que lo vivió", enfatizó César, aún orgulloso por el logro.
Y detalló el futuro inmediato del medallista olímpico: "Hasta fin de año seguirá en Olimpo, luego tiene propuestas de todo tipo por integran la Selección Argentina. Una de las alternativas es Bahía Basket, pero no nos apresuramos, tratamos de guiarlo para no cometer errores ".
"Fue muy parejo, el chico ruso también era muy bueno. Fausto le puso mucha onda junto a sus compañeros, haciendo algo siempre diferente. Eso le jugó a favor frente al jurado", concluyó Ruesga.
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