Ataque de barras en Comodoro Rivadavia: “No sabíamos cómo podía terminar todo”

Marco González, el director técnico bahiense del Club Deportivo Rincón, equipo que fue atacado por barras en la cancha de Jorge Newbery de Comodoro Rivadavia, en la previa del partido de vuelta por la final Patagónica del Regional Amateur.

Tal como informó La Brújula 24, uno de los más afectados fue otro oriundo de Bahía, el ex Bella Vista, David Boquín, quien sufrió un corte en la boca. Luego, el Consejo Federal decidió suspender el partido porque también fueron agredidos dos veedores de AFA que estaban en el lugar.

“He recibido muchos mensajes de gente de Bahía y eso a uno lo reconforta, porque ayer no la pasamos bien. Ahora estamos en Rincón de los Sauces, pero la pasamos realmente mal”, le contó esta mañana González al equipo del programa “Hora Pico”.

Y agregó: “Lo que se hizo público fue una parte, tuvimos tres horas muy complicados, fue ni bien ingresamos a la cancha, con el cuerpo técnico y utileros. Además, como era sin público visitante, llevamos 15 dirigentes. Decidimos entrar todos juntos, pero nos hicieron ir por donde había hinchas de ellos y se complicó la cosa”.

Así quedó el delatero ex Bella Vista, David Boquín.

“Yo fui primero, sabíamos que nos iban a gritar cosas, y uno empieza a naturalizar esas cosas, pero cuando pasaba la última parte del grupo se metieron barras de ellos y hubo un enfrentamiento. Varios jugadores recibieron golpes, nos robaron cosas. Yo no pude estar en el foco de la violencia, aunque hubo jugadores que la pasaron muy mal, eran 3 policías contra 20 barras”, recordó con indignación el DT.

En esa misma línea, relató que “quedamos encerrados en un vestuario. Ahí destaco que la policía y jugadores de Newbery nos ayudaron, sino no íbamos a poder salir. Después ya no podíamos irnos de la cancha, había 12 mil personas que estaban esperando el partido, es una lástima que esto pasó por 20 barras”.

“Teníamos jugadores golpeados, el arquero que se sacó el codo, David con la cara toda cortada, dirigentes y jugadores shockeados, sin los botines. Se iba poniendo cada vez más violento porque la gente se enteraba de que no salíamos, era imposible”, explicó.

Y remarcó: “Nos tuvieron que trasladar a una cantina porque se metían hinchas por todos lados, volaban piedras, no sabés lo que puede llegar a pasar en un momento así. Los hinchas de ellos querían entrar por todos lados. Los que estamos adentro tenemos que manejarnos mejor con las redes sociales, cuando ganamos en Rincón los dirigentes de ellos hicieron algunas declaraciones que no ayudaron, decían como que nosotros los habíamos tratado mal acá”.

“Durante la noche anterior la pasamos mal en el hotel, creo que esas cosas tenemos que empezar a cambiarlas, porque el fútbol lo juega mucha gente, es educación. Muy difícil imaginar lo que hubiera pasado si ganábamos en la cancha, encima después vimos el enfrentamiento que hubo de los hinchas con la policía, estaban todos en la cancha”.

“Nosotros estábamos convencidos de que íbamos a ganar el partido, pero ahora eso no es lo importante. En un momento intentamos salir del estadio porque la policía no sabía por donde sacarnos, la mayoría estábamos incomunicados”, consideró González.