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Dos periodistas analizaron el juicio contra Cristina Kirchner por la obra pública

Con visiones antagónicas, Diego Cabot y Raúl “Tuny” Kollmann expresaron las sensaciones sobre la causa que transita los alegatos, con la exposición del fiscal Diego Luciani.

El juicio por los presuntos delitos con la obra pública en Santa Cruz entre 2003 y 2015, donde se juzga a la vicepresidenta Cristina Fernández de Kirchner y a otros doce imputados, se reanudó este lunes con el inicio del alegato fiscal, que se extenderá durante nueve audiencias.

Tras el receso judicial de invierno, el Tribunal Oral Federal N°2 escucha desde este lunes en su rol de parte acusadora al fiscal de juicio Diego Luciani, quien expondrá durante nueve audiencias, a razón de tres por semana.

LA BRÚJULA 24 conversó esta mañana con los periodistas Diego Cabot, del diario La Nación, y Raúl Kollmann, de C5N, quienes expusieron su mirada respecto a una causa sumamente resonante que tiene en vilo a la sociedad y el arco político en particular.

“Interpuso recursos ante la Justicia y perdió por paliza”

“El inicio de la exposición de Luciani tiene la espectacularidad de escuchar a una persona de un poder del estado haciendo una acusación muy fuerte con la imputada escuchándola, más si se trata de una Vicepresidenta. Dentro de este juicio hubo una cantidad de audiencias que también tuvieron espectacularidad en la narración en primera persona”, sostuvo Cabot, en su charla con el periodista Germán Sasso.

Luego, afirmó que “lo más interesante de estos casos es que la Justicia avance y haga un juicio con todas las garantías, más allá de algunos tuits donde se nota la obediencia, hace muchos años años que la expresidenta ejerció todos los recursos en cada instancia y fue perdiendo por paliza”.

“Hay una cantidad de instancias que fueron confirmando o rechazando los planteos que ella hace que tienen que ver más con la tribuna que con lo procesal. Lo otro es el regreso sobre los hechos porque este tipo de procesos que tienen tantos años no tienen una argumentación para demostrar la inocencia, sino que lo que se busca es que el juicio se prorrogue en el tiempo. Eso es ilegítimo y termina difuminando los hechos, olvidando lo que realmente se está juzgando”, destacó, en otro segmento de la entrevista radial.

Paralelamente, aseveró que “en este caso, nosotros escribimos un libro en 2007 con mi amigo y colega Federico Olivera, donde hicimos una aproximación a Santa Cruz y replicamos una maqueta donde el financiamiento de la política demuestra que es algo histórico. El fiscal considera que se creó un oferente como Austral Construcciones, se le direccionó dinero y se le dio todo tipo de facilidades, además de cancelar sistemas de control”.

“Configura un esquema ilícito, hubo entregas de licitaciones en tiempo récord, aumento de precios, plazos de hasta 63 años a favor de Lázaro Báez. Y eso no podría haber estado orquestado si no había complicidad del poder político. Al menos en esta causa no se está investigando el bolso que se llevaron o se dejaron de llevar, sino del direccionamiento de la obra pública”, agregó Cabot.

Consultado respecto a otros hechos similares que se imputan, confirmó: “En la causa Hotesur, por ejemplo, sí se aborda esa devolución de dinero en negro. Creo que ambas deberían haber corrido juntas. Las coimas siempre son difíciles de probar porque eso no se firma, por eso las denuncias suelen ser por sobreprecios. Los famosos bolsos de López tienen condenas sólo por los delitos que se pudieron probar, porque las conjeturas no alcanzan”.

“Es difícil probar que Lázaro Báez iba a cenar con Néstor Kirchner y que salía con bolsos llenos de dólares. Lo que sí se puede corroborar es que se direccionan obras públicas hacia algunas empresas en particular. Luciani va a intentar que se pruebe eso, también irregularidades en los controles, falta de finalización en la obra que igualmente hayan sido pagadas. El fiscal habla de 51 licitaciones y solo tres obras se terminaron en tiempo y forma, que no eran públicas sino de remediación de canteras, donde es más sencillo robar dinero porque a diferencia del asfalto, el ripio no puede verse”, destacó.

Por último, Cabot disparó: “Una de las cosas más nefastas del pensamiento humano es no exigir que los funcionarios cumplan con sus compromisos. Hay mucha contratación subjetiva en los estados que son difíciles de controlar, recuerdo que con los trenes habían creado empresas para limpiar los baños y sus contratos en un ramal metropolitano se necesitaba muchísima gente y es imposible probar”.

“No existen pruebas, pero van a terminar condenándola”

“Durante todo el juicio, que le fue desfavorable a la acusación, los testigos hablaban en contra, por ejemplo los empresarios como Calcaterra, Chediak, entre otros. Dijeron que Lázaro Báez ganaba licitaciones porque podía ofrecer precios más baratos porque tenía las maquinarias en el sur. ayer el fiscal se despacha diciendo que las licitaciones fueron fantasma y una puesta en escena”, señaló Kollmann, al comienzo de su testimonio.

Y fue aún más allá: “Eso no surgió del juicio. Plantea un escenario en el que menciona que las empresas son cómplices, sin explicar porqué le harían un favor a Lázaro Báez, a quien odiaban. Luciani hizo mucho show, jugada para la tribuna y nada asentado para el propio juicio. La política de los gobiernos, incluso antes del kirchnerismo, en época de Menem, indica que el Estado nacional no puede estar en cada provincia, por lo tanto son esos territorios los que tienen que licitar, adjudicar y controlar”.

“En total hubo 900 convenios y lo que se hacía era controlar las obras cuando había una queja o al azar. Eso dependía de cada provincia y no solo de Santa Cruz, con su legislación particular. Los fiscales objetan ahora que Báez, que tenía acciones en tres empresas, dos de ellas se hayan presentado a la licitación. Los funcionarios de Santa Cruz dicen que no deben observar de quién era cada una, solo se dedicaban a que la obra se haga bien y los precios sean acordes a los trabajos que se presupuestaban”, agregó “Tuny”.

En paralelo, explicó que “si alguien licita, debe presentar una garantía porque si uno incumple te la ejecutan. También hicieron mucho eje en las demoras, en que el Estado no controló las tardanzas y ahí otra vez se montó un show. El fiscal mencionó la Ruta 40 que pasaba por un costadito de un campo de Pérez Companc e hizo juicio, había lugares donde las trazas debían ser con expropiaciones de terrenos o lotes de YPF”.

“El macrismo mandó a hacer una auditoría y las conclusiones es que todo lo pagado fue hecho, textualmente dice que no hubo deficiencias constructivas de relevancias ni tareas certificadas sin ejecutarse. El único desajuste es del 0,1%. Esos auditores declararon en el juicio oral y el juez original (Ercolini) nunca mandó a hacer una pericia. Es decir, que este Tribunal, con el juicio encima, no pudo periciar las 51 obras que se objetaban, solo lo hizo con cinco. Los peritos oficiales hicieron agua notoriamente”, refirió, en otro segmento de la entrevista radial.

Consultado sobre el proceso previo a los alegatos, Kollmann entendió que “el juicio fue muy desfavorable para la acusación. No sé si podrán sostener lo de los sobreprecios porque hay un dictámen de los contadores afirmando que eso no es real. De los tres ingenieros, dos afirman que hubo sobreprecios y la de la defensa dijo que no. En Santa Cruz, las obras son complicadas por cuestiones climáticas y te obliga a llevar el asfalto en caliente desde Ensenada donde tiene la planta YPF”.

“Esencialmente, lo que van a decir es que Lázaro Báez fue beneficiado porque era amigo de Néstor Kirchner, que las licitaciones fueron un show pese a que en el juicio no fueron cuestionadas. Lázaro regaló el mausoleo donde descansan los restos de Néstor, es innegable la relación de cercanía de ambos. Cristina nunca firmó nada porque las obras se deciden en el Congreso a partir del presupuesto y si hay una ampliación por la inflación, lo resuelve el Jefe de Gabinete”, agregó.

Sobre el cierre, el conductor televisivo advirtió: “No hay ningún mail de ella sobre estas obras, sin embargo ellos hablan de una gigantesca asociación ilícita que no podía funcionar sin la anuencia de la Presidenta de aquel entonces. En los tres años del juicio nadie nombró ni una vez. Creo que hay prueba contra Lázaro Báez en la causa donde se llevó el dinero al exterior o en la de los cuadernos contra un secretario de Cristina como Daniel Muñoz y el financista Clarence. Pero en esta causa no vi nada muy nítido, pero ellos necesitan condenarla y supongo que esto terminará ocurriendo”.

“Hay una ofensiva más fuerte del Poder Judicial con Rosatti en el Consejo de la Magistratura, con Comodoro Py, han vuelto con todo. El último día, el Tribunal autorizó a incorporar pruebas de otros juicios, eso se hace al inicio de un debate. El mensaje de texto esencial entre José López y Lázaro Báez fue el 25 de noviembre de 2015, cuando faltaban 15 días para que se fuera de la Casa Rosada, había mucha preocupación por la cantidad de gente que trabajaba en las obras y que el macrismo no las continuara. Antes de eso, no tienen ningún mensaje anterior de ella en el que demostrara que se preocupaba por las obras en Santa Cruz”, concluyó.

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