“Puede pasar cualquier cosa”, dijo el periodista Ignacio Hutin

El periodista Ignacio Hutin, autor del libro “Ucrania. Crónica desde el frente”, habló con el equipo periodístico del programa “Bahía Hoy”, que conduce Germán Sasso por LA BRÚJULA 24, en relación al tema que mantiene en vilo al mundo entero por una posible guerra inminente, con Rusia como gran protagonista.

Primero, el profesional destacó que se trata de un conflicto muy complejo y con muchas aristas. Por caso, refirió que “Ucrania está en guerra desde hace casi 8 años, siendo un país dividido en dos, con un oeste que mira hacia occidente, donde se habla ucraniano y está muy ligado a la producción agrícola”. Y dijo que “del otro lado hay una población que habla ruso y se vincula mucho más a la industria”.

“La guerra que comenzó en 2014 tiene mucho que ver con eso y marcó un quiebre en las relaciones entre ambos países”, argumentó.

Siguiendo esa línea, recordó que “hasta ese momento eran socios comerciales, pero ya para 2015 no había vuelos directos, algo que es totalmente ridículo entre dos países que siempre tuvieron lazos históricos”.

“A partir de ese momento Ucrania empezó a mirar más hacia el lado de la OTAN, hasta que en 2019 cambió directamente su constitución, incluyendo un mandato que obliga al país a intentar integrarse a la misma. Esto por supuesto no le simpatiza a Rusia”, contó.

Y aseveró: “Históricamente, Ucrania era el patio trasero de Rusia y a partir de ese momento todo cambió. De todos modos, eso es algo que no va a pasar en el corto plazo. Yo creo que Ucrania es una excusa para que Rusia exija un replanteo de las políticas de seguridad y defensa europeas que se plantearon en los 90, cuando se disolvió la Unión Soviética. Esa Rusia era mucho más débil y no podía imponer condiciones, hoy eso es totalmente distinto”.

Amenaza de conflicto bélico

“Ucrania ya está en guerra, pero una nueva y abierta entre Rusia y la OTAN quiero creer que no va a pasar. El problema es que ayer se quemaron todos los pronósticos porque Rusia decidió reconocer a dos regiones que se declararon independientes. El problema es que en septiembre de 2014 y febrero de 2015 se firmaron los acuerdos de Minsk que planteaban un camino a seguir para terminar con la guerra, más allá de que nunca se pudieron llevar a cabo. Funcionaban como una hoja de ruta, pero ahora desaparecen y puede pasar cualquier cosa, no hay pronósticos”.