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"efecto vidal"

Eliminan la imagen del vicegobernador bonaerense en la boleta

El oficialismo busca resaltar la presencia de la gobernadora, buscando reducir la ventaja que saca el kirchnerismo en las encuestas.

María Eugenia Vidal, y de fondo Daniel Salvador.

La mezcla de ansiedad e inquietud que dominaba al equipo bonaerense hace dos semanas se transformó en los últimos días. Si bien María Eugenia Vidal corre de atrás, como repite en cada mesa de trabajo su estratego y mano derecha, Federico Salvai, en el búnker de campaña bonaerense destacan un movimiento subterráneo, que no se puede medir, pero que ayudará a recortar la diferencia en el sprint final: el efecto Vidal en el cuarto oscuro.

La figura de la gobernadora bonaerense, la candidata con mejor imagen del país, pesará el día de la elección, no hay dudas en el comando bonaerense. Por eso no dejaron nada librado al azar, por ejemplo, en la conformación de la boleta. Cuando el 11 de agosto los 12.515.361 bonaerenses, más unos 500.000 extranjeros habilitados, ingresen a votar, se encontrarán con una boleta en que lo que resalta es Vidal.

A diferencia de Mauricio Macri, que aparece junto a su candidato a vicepresidente, Miguel Pichetto, la mandataria bonaerense está sola, sin Daniel Salvador. Y es la única con un color diferente, usa una camisa colorada que la hace sobresalir. La idea fue de Salvai, jefe de Gabinete, que de esa manera buscó que la imagen de Vidal sea la que se imponga en una mirada rápida, como sucede en el cuarto oscuro. Las escasas pruebas que se hicieron fueron exitosas. “Hay una conexión emocional entre María Eugenia [Vidal] y la ciudadanía que atraviesa la dificultad económica”, dijo el ministro de Asuntos Públicos, Federico Suárez, a cargo de la comunicación estratégica.

Este efecto no es una característica únicamente bonaerense, lo mismo visualizan en el comando nacional, que lidera el jefe de Gabinete, Marcos Peña, en otros dos distritos de peso: la ciudad de Buenos Aires y Mendoza. Entre las tres provincias suman el 50% del electorado. Horacio Rodríguez Larreta y Alfredo Cornejo también empujan la boleta nacional para arriba.

La campaña avanza a toda velocidad, pero cerca de Vidal anticiparon que se acelerará en las dos semanas que quedan. “Más volumen, cantidad y potencia”, describió uno de los integrantes de la mesa chica de la gobernadora. Vidal también acelerará su instalación pública. Televisión, radio y muchas recorridas se anticipan para los próximos días, como sucedió en 2015 y en 2017. Ayer, por ejemplo, lideró un acto con el Presidente en Mar del Plata, donde volvió a marcar el tono de la pelea electoral, en la que busca marcar diferencias con la gestión de Daniel Scioli, y evitó la confrontación directa con el kirchnerismo.

“No contesto las agresiones”, dijo ayer la gobernadora sobre los dichos de Aníbal Fernández, quien había sostenido que antes de dejar a sus hijos con Vidal se los dejaría al femicida Barreda.

Todos los que rodean a Vidal destacaron “la conexión” que generó con los bonaerenses. “Tiene una atracción diferente, un costado emocional muy fuerte”, resaltaron desde su círculo íntimo. Apuestan a que esa conexión pueda torcer el número en octubre. “Nadie es indiferente a la figura de Vidal. Ella visibilizó muy fuerte el rol del gobernador”, sostuvo Fabián Perechodnik, secretario general de la provincia, recaudador de la campaña y uno de los armadores territoriales.

Las encuestas con las que trabajan en el búnker bonaerense hablan todavía de un triunfo de Axel Kicillof por cuatro o cinco puntos. En Buenos Aires, principalmente en la tercera sección electoral, Cristina Kirchner es muy fuerte. Aunque las cuentas no son buenas para Vidal, todos los días crece un poco más. Es por eso que para los últimos días dejó el terreno que mayores dificultades presenta, el conurbano. La gobernadora y su equipo desplegarán toda su artillería electoral para intentar rescatar algunos puntos en las secciones electorales donde peor está la imagen de Macri. “El conurbano es el territorio más difícil, aunque mejoró el clima”, reconoció un funcionario. La estrategia de Vidal también va en busca de los votos que obtuvieron Sergio Massa y Florencio Randazzo hace dos años. El tigrense, que volvió al kirchnerismo, ocupó el tercer lugar, con el 11,32%, mientras que el exministro de Cristina Kirchner no llegó al 6%. En esa elección Cambiemos se impuso en la provincia con Esteban Bullrich como protagonista, con el 41,3%, ante la expresidenta, que sumó casi 38%.

La meta cambió. Producto de la polarización extrema, principalmente en el distrito bonaerense, ya no alcanza con el 41%. “El objetivo para las PASO es quedar lo más cerca posible”, admitió un importante funcionario de Vidal. Pero el objetivo final para octubre ya tiene un nuevo número: 45 por ciento. “Necesitamos votos de gente que hasta ahora nunca nos votó”, describieron allegados a la mandataria. A eso estará abocada de acá en más Vidal.

En la boleta bonaerense, la foto de Vidal estará sola

Contraste

La boleta de Juntos por el Cambio en su tramo para gobernador mostrará únicamente la foto de María Eugenia Vidal. Del candidato a vicegobernador, Daniel Salvador, solo se exhibirá el nombre. Las otras fuerzas políticas de la provincia muestran a la fórmula para gobernador y vice, como ocurre con el kirchnerismo y el lavagnismo.

Fuente: La Nación.

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